Clint Eastwood no deja de asombrar. Con un pasado político más bien conservador, con los años (cuenta con 80) se convirtió en el mayor radiógrafo de la sociedad norteamericana. Desde “Los imperdonables” sigue empeñándose en dibujar la América profunda, con títulos como “Río místico”, “Million Dollar Baby” y “Gran Torino”. Si este docudrama lo hubiese encarado Oliver Stone, el retrato sería mucho menos rico. J. Edgar Hoover dirigió el FBI (Oficina Federal de Investigación) por casi medio siglo con mano de hierro. Denostado, temido y admirado, combatió el crimen organizado y fue un anticomunista feroz. Sus investigaciones pusieron en jaque a más de un gobierno. Despiadado y heroico, escondió su homosexualidad, convirtiéndose en emblema de justicia. Eastwood no elude sus zonas oscuras y consigue un retrato potente del personaje. Di Caprio, a la altura de tamaño compromiso.
por Jorge Carnevale
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