Si Buenos Aires es la París de Sudamérica ¿la calle Corrientes es la Broadway del Sur? A nivel estadístico, no. Tanto en Nueva York como en Londres se estrenan no menos de veinte musicales por temporada solo en el circuito comercial, sin contar el off. La escena local, incluyendo el teatro alternativo, le arrima tímidamente a la mitad. Sin embargo, el género parece –año tras año– afianzarse más aún en el gusto del público argentino.
Los musicales convocan a tal punto que, en el último trimestre, “Mamma mia!” figuró en forma constante en el “top five” de mayor recaudación de la Asociación Argentina de Empresarios Teatrales, un ranking en el que los musicales compiten con otros géneros teatrales y que, en los últimos treinta días, ha estado liderado en forma indiscutida por “Stravaganza”, un espectáculo de revista que, si bien no puede ser calificado estrictamente como “musical” le pega en el poste al género, demostrando que, a la hora del consumo teatral, la música y el despliegue escénico son factores de decisión. En el primer trimestre del año, el trono lo ocupó otro representante del género: “Por amor a Sandro”.
Solo en el 2012 y estrictamente en el circuito comercial, estuvieron en cartel, además de “Por amor a Sandro”, “Excálibur” (de la dupla Cibrián-Mahler), “Freddie” (el tributo al cantante de Queen protagonizado por Hernán Piquín) y la quinta reposición –desde su estreno en 1979– de “El diluvio que viene”. Se estrenaron y continúan en cartel, además de “Mamma mia!”, “Casi normales” y “Forever Young” –ambas versiones de obras extranjeras–, “Embarazados” y “Alicia en Frikiland”, de factura nacional.
Más información en la edición impresa de la revista
por Diego Gualda
Galería de imágenes
Comentarios