Thursday 28 de March, 2024

RESTAURANTES | 16-03-2015 18:38

Nace Palermo Bollywood

“Gran Dabbang”. Scalabrini Ortiz 1543, Palermo. 4832-1186. Cocina india/sudesteasiático. Lu. a sáb. de 20 a 24. Sólo efectivo. Precio promedio: $ 200.

En Buenos Aires hay todo un circuito de restaurantes cuyos propietarios son jóvenes parejas conformadas, en general, por un argentino y una extranjera. Son auténticos negocios familiares donde ellos cubren todos los frentes, desde la cocina hasta el salón, y son frecuentados sobre todo por extranjeros que viven en Buenos Aires ansiando ampliar sus opciones gastronómicas. Algunos ejemplos son Nola, Casa Félix, Fukuro Noodle Bar, Chippery la apertura más reciente, Gran Dabbang, ubicado sobre la Av. Scalabrini Ortiz, tierra de nadie en pleno Palermo.

Gran Dabbang debe su nombre a un héroe del cine indio y su cocina tiene el espíritu de las películas de Bollywood. Siguiendo la regla, sus dueños son el cocinero argentino Mariano Ramón y su esposa Pip, una botánica inglesa, quienes se conocieron en Nueva Zelanda y juntos siguieron a Tailandia, Vietnam, Malasia, Cambodia, Laos, India y finalmente Londres. Ser aceptado fue lo más difícil pero pronto Mariano logró trabajar en cuanta cocina se cruzara en su camino. “En India son muy celosos de sus recetas, el uso de las especias es un secreto conservado entre clanes de cocineros”, nos cuenta. Aún así, aprendió. Dicen los expertos que, cuando hay, en Gran Dabbang se come el mejor curry de Buenos Aires. La carta cambia constantemente, de acuerdo con los productos disponibles y la inspiración del cocinero, pero los curries siempre vuelven.

La ambientación es austera, no se toman reservas, no se aceptan tarjetas y el servicio es el mínimo indispensable. La estrella indiscutida en Gran Dabbang es la comida, y de verdad brilla. Las porciones son chicas para poder picar de todo y puede asegurarse de que probará todo el abanico de sabores reconocibles por sus papilas gustativas. Dulce, picante, ácido y amargo en todas las combinaciones imaginables. Todo viene acompañado de salsas (sweetchilli), chutneys (de zanahorias), semillas (de cebolla) y hierbas (lima kafir) que quizás nunca haya probado, pero que abrirán un nuevo mundo de posibilidades de sabor.

Lo único fijo en la carta son las pakoras, unos buñuelos de acelga y harina de garbanzos, muy livianos y crocantes, que tienen prácticamente un club de fans. Otros platos que probamos el día de nuestra visita fueron el falafel de plátano y garbanzo, con coleslawsatay y ketchup de tuna; los kebabs de pollo con ensalada de mango, pepino e hinojo, y chutney de coco; y las aceitunas marinadas con pickles de papaya. Para demostrar que la buena cocina no tiene fronteras, Mariano incluye entre sus creaciones preparaciones más cercanas a lo nuestro, como la burrata con fainá a las que les suma berenjenas con harissa, granos de granada y cebolla roja. Un manjar. De postre, su versión del queso y dulce: cheddar estacionado con limas y mamones en almíbar.Cocina creativa y sabrosa para abrir el paladar.

Cocina ★★★★★

Servicio ★★★

Ambiente ★★

por Cayetana Vidal Buzzi

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