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SOCIEDAD | 03-02-2016 17:04

Agustina Kämpfer, una militante en retirada

Se alejó del periodismo político y busca refugio en el portal de su novio Rial. Ver fotos

El cambio es simplemente la misma estructura de la vida” profesaba el líder espiritual Osho. Uno de los filósofos y mantras favoritos de Agustina Kämpfer que a lo largo de sus treinta y cuatro años de vida se encargó de seguir al pie de la letra. En este 2016, la ex de Amado Boudou, y hoy novia de Jorge Rial, volvió a reciclarse y borró su pasado como militante kirchnerista. Abandonó “Intratables”, en la pantalla de América, adonde había llegado como parte de un operativo blanqueo para despegarse de la imagen negativa de Boudou. Se fue de viaje junto a Rial y sus hijas a las tierras consumistas de Estados Unidos, y volvió con un nuevo proyecto poco nacional y popular, “Minitah”, un sitio íntegramente femenino que depende de “Big Bang News”, el portal de noticias de su novio. El nuevo estilo de vida light y zen de la ex K, que cambió el relato por las virtudes y el divismo del showbusiness.

“Siempre se vuelve al primer amor", así que ahí vamos, a reiniciar un romance con el teclado”, escribió Kämpfer desde la red social Instagram, la única que utiliza desde que abandonó su cuenta de Twitter en marzo del 2015. Una de las plataformas donde la colorada solía exponer su ideología K. De esta forma, la joven no sólo se despidió de “Intratables”, en donde su personaje había generado intensos debates, sino de la política en sí. Es que, como cuentan conocidos de la ex panelista a NOTICIAS, “desde el cambio de Gobierno, estaba un poco incómoda”. Otros, en cambio, afirman que decidió irse antes de enfrentar el juicio a Boudou por enriquecimiento ilícito, y por el cual está imputada. Por tales motivos, la decisión habría sido bajar el perfil. De esta forma se recluirá en los brazos protectores de su pareja, y tendrá su propio lugar dentro de “Big Bang News”, el portal de Rial. Allí ella será la encargada de dirigir “Minitah”, su propio micrositio dedicado a temas de moda y femeninos. Curiosamente, su nombre es una palabra que la colorada suele utilizar para hacer referencia a situaciones que ella considera típicas de las mujeres.

Consentida. Fue en Estados Unidos donde Kämpfer terminó de definir su futuro laboral, en la intimidad, junto a Rial. Antes de irse, se despidió de sus compañeros de “Intratables” como siempre. Pero al volver, el 20 enero finalmente presentó su renuncia a América, y con ello su lugar como periodista militante K. Eso sí, su decisión sorprendió a todos, que pensaban que desde su romance con Rial, la colorada se iba a quedar de por vida.

Desde su llegada a “Intratables” en el 2015, Kämpfer siempre fue una de las más mimadas en América. Esto, indican allegados al canal, siempre por el respeto o temor que inspiraban sus parejas. Primero, por ser la ex del entonces vicepresidente, lo que le permitió más de una vez alardear de tener llegada directa a los funcionarios kirchneristas. “Hablé con Berni y me dijo...”, solía decir la periodista. Luego llegó el romance con Rial y los aires de diva. “Tenía trato preferencial”, afirman cercanos a la ex panelista. A tal punto, que utilizaba el camarín de su novio a donde se llevaba a los maquilladores y peinadores, que se suponía que eran para todo el equipo.

Su presencia en el programa siempre había generado malestar. Cada vez que Kämpfer pasaba, se instalaba el silencio. Quienes la tratan la definen como una persona soberbia, y una buena tiempista. “Sabe en qué momento actuar. No hace nada al azar”.

Tampoco tuvo que ver el azar en el cambio de actitud y de look al que se sometió Kämpfer. Sino más bien, el hecho de convertirse en la novia de uno de los hombres más importantes del espectáculo. Adelgazó cuatro kilos, se cortó el pelo a la altura de los hombros, y cambió su estilo hippie por uno más urbano y trendy, que incluye firmas internacionales como “Yves Saint Laurent” y “Prada”. Pero no es la primera vez que la ex panelista pasa por una metamorfosis fashion por la labor de su hombre. Cuando se convirtió en segunda dama, ya había tenido que resignar sus jeans por los vestidos “Jackie” y los tacos.

Y tampoco es la primera vez que se suma a una “causa” por su pareja. Así como antes era común que la periodista retuiteara frases de distintos funcionarios y exponentes del kirchnerismo, hoy cultiva un perfil un tanto más hedonista, y alejado del debate político. Prueba de ello fue el último viaje que hizo junto a Rial hacia Estados Unidos, un destino vapuleado por el modelo kirchnerista que ella solía profesar. Ante las críticas por su aparente hipocresía, la periodista se calzó escote en una malla azul eléctrico y dijo: “Panqueca no es ser kirchnerista y acompañar a tu novio a Miami. Panqueca es llegar a la ciudad y clavarte una enteriza acanalada azul eléctrico que no usarías en ningún otro lugar del mundo” (sic). “Panqueca” o no, Kämpfer sabe como salir ilesa a cada crítica sobre los múltiples cambios de pareja, look o ideología en su vida. Es que tal como afirma Osho: “Tú no puedes aferrarte a nada en un mundo cambiante”. Hasta que llegue el día en que Kämpfer cambie incluso de líder espiritual.

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