Antes de la pandemia, el doctor Domingo Liotta, de 96 años, fue consultado por el presidente Alberto Fernández. El máximo mandatario argentino quería conocer los detalles del texto que gestó el Sistema Nacional Integrado de Salud que el médico y ex secretario de Salud de Juan Domingo Perón redactó y se convirtió en ley en 1974. El mismo que, años más tarde, sería derogado por el Gobierno militar.
Hace horas, en la Ciudad de la Plata se realizó un acto de unidad del Frente de Todos que contó con la presencia del Presidente, la vicepresidenta Cristina Kirchner, el gobernador bonaerense Axel Kicillof y Sergio Massa. Justamente ahí, CFK remarcó la necesidad de pensar un “Sistema Nacional Integrado de Salud”, para hacer más eficiente el que ya hay en Argentina. Algo que ya existió en nuestro país.
NOTICIAS contactó con el creador de ese sistema, el cirujano cardiovascular Liotta, inventor del primer corazón artificial implantado en el mundo por el doctor Denton Cooley el 4 de abril de 1969, más tarde, ministro de Salud y médico presidencial durante el tercer mandato de Perón.
“Mucha gente me consultó por ese tema. Colaboraron médicos especialistas de todos los partidos políticos de la Argentina, entre otros Aldo Neri, Canitrot y Prieto. Intervinieron todas las fuerzas políticas del país en la redacción: radicales, socialistas, no solo peronistas. Esto evito ríspidas confrontaciones en el Congreso. Lo llevé y presenté en Ginebra en la Organización Mundial de la Salud (OMS), por pedido del mismo Perón, en mayo del 74, en el momento de la guerra fría. Llamó la atención lo que presentaba un país sudamericano, cuando EE.UU. y Canadá intentaban presentar algo”, explicó Liotta.
En su libro “ Las Aventuras de un Cirujano de Corazón”, Liotta revela que la delegación de Canadá estuvo muy atenta durante la sesión en la OMS. Poco después, aplicaron un sistema de salud de notable similitud con el argentino expuesto en Ginebra. Incluso, posteriormente en EE.UU. Hillary Clinton fracasó con un plan similar. “Era un sistema para favorecer a la gente pobre y al trabajador, no para el que tiene un prepago. No son menos del 65% de la población argentina. Fue derogado en forma abrupta por el gobierno militar que masacraba a la juventud y derogaba cosas importantes. Nunca mas se pudo reponer, ni con Alfonsín, ni Menem ni Kirchner. Las leyes eran para regular automáticamente todo el sistema sanitario argentino, incluso médicos y enfermeras. Nosotros lo llevamos a Neuquén, como Provincia prototipo y sigue funcionando muy bien allí, según el Gobernador”, afirmó Liotta. Y agregó que era una ley nacional a la que tenían que ajustarse los municipios y provincias; que regulaba incluso a las enfermeras y médicos que progresaban y hasta el sistema los podía enviar al exterior para su perfeccionamiento.
El sistema de Liotta, además, sumaba algo interesante: que todos los sistemas de salud debían renovarse cada 10 años, de acuerdo a las nuevas tecnologías y los avances de la medicina.Y concluyó: “estuve con Alberto Fernández hace muchos meses y me pidió también hablar del tema, y asentí con él; pero vino el asunto de la pandemia y allí quedó”.
por Roberto Battellini
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