Ayer, y tras las tensiones que generó la quita de coparticipación a la Ciudad en beneficio de la Provincia de Buenos Aires, el presidente Alberto Fernández, Horacio Rodríguez Larreta y Axel Kicillof, volvieron a verse las caras en la Quinta de Olivos para definir cómo seguirá la cuarentena en el AMBA.
La invitación al jefe de Gobierno porteño llegó a través de Julio Vitobello, secretario general de la Presidencia. Fernández quería que la cita fuera más temprano, pero Larreta le dijo a Vitobello que no podía porque tenía un Zoom de trabajo. Finalmente el encuentro se produjo cayendo la tarde. Larreta fue el último en llegar.
“Casi te mando el remís ahora que te quedaste sin plata”, lo chicaneó con humor Kicillof para romper el hielo. “Pensé que me mandabas el helicóptero, ahora que tenés dos”, le respondió el Jefe de Gobierno porteño en el mismo tomo. El ida y vuelta sacó sonrisas entre los presentes y aflojó la charla posterior, que fue de todos modos extensa.
Desde la provincia y la ciudad coinciden en que a pesar de las diferencias ideológicas, y la grieta que abre la pelea por la coparticipación (que Larreta llevará a la Corte Suprema), la relación entre los funcionarios de ambos gobiernos es frecuente. “Horacio y Axel se hablan todo el tiempo, discuten, pero colaboran en lo operativo”, apuntan.
La relación sin embargo se tensó con el presidente, que en el día del amigo, el 20 de junio, había calificado a Larreta justamente en esa categoría. Entonces el Jefe de Gobierno porteño había negado que le asignara el rol de “amigo” a Fernández: “los amigos son los de toda la vida con los que voy a ver a Racing”, fue su respuesta distanciándose.
Ayer tras la reunión tripartita, el presidente le pidió a Larreta que se quedara para dialogar a solas. Con menos testigos. La charla fue correcta, pero ya nada será igual: Larreta le remarcó su posición de dirimir el conflicto en el máximo tribunal. De todos modos, remarcan desde la Ciudad, se seguirá colaborando como hasta ahora. Aunque se repite el razonamiento del “tiro por la espalda en la trinchera”, no se cierran los puentes.
En esa senda, los jefes de gabinete, Santiago Cafiero (Nación), Felipe Miguel (Ciudad) y Carlos Bianco (Provincia), se habían reunido el miércoles en casa Rosada para definir los detalles técnicos de las aperturas. El intercambio había sido también largo, en el que la Ciudad había peleado por más mesas en las calles para la gastronomía (algo que se producirá), y la apertura de aulas a cielo abierto (todavía demorado). Sin embargo, Fernández, Kicillof y Larreta volvieron a repasar los temas a fondo.
Al final, comunicado oficial con foto de los tres, con el presidente sonriente, para tratar de transmitir calma. Necesidad presidencial tras las tensiones con su principal interlocutor en Juntos por El cambio, en la que la el presidente terminó esculpiendo la figura de Larreta como líder opositor, como define la tapa de NOTICIAS de esta semana.
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