Thursday 28 de March, 2024

PERSONAJES | 29-12-2011 18:21

“Quisiera aprender a delegar y disfrutar”

La cantante estrena banda con su hermano en el grupo “V”. El bagaje de Bandana, la sensualidad redescubierta, hip hop y separación.

El camino fue tan largo como sinuoso. Pero tras 10 años de búsqueda, Virginia Da Cunha asegura estar donde siempre quiso. Sí, aunque cueste creerlo ya pasaron 10 años de la creación de Bandana, aquel grupo pop femenino que volvió locos a chicos y adultos por igual y rompió todo récord de venta existente. También pasaron otros 4 años desde que se formó Virgin Pancakes, la banda con aire “teen-skater” que Virginia lideró y llegó hasta el Vans Warped Tour en California, meca de la fusión entre el punk-rock y los deportes extremos. Y ahora, tras ser la muñequita rubia en un grupo musical de chicas y un integrante más en un grupo skater, encarna un nuevo rol, más femenino y protagónico, acompañada por su hermano Fernando y otros dos integrantes: la banda “V”. “Es la V de Virginia, pero fonéticamente también suena como `be´, del verbo `ser´ en inglés, y nos gusta el guiño”, explica.

Noticias: ¿Cómo nació este proyecto?

Virginia Da Cunha: Es el resultado de años de búsqueda en un camino independiente, que recorrí con mi hermano. Fuimos mutando y buscando el sonido y llegamos a esto.

Noticias: ¿Cuál es su rol exacto en la banda?

Da Cunha: Canto y escribo. Generalmente le doy las letras a mi hermano con un referente musical, un clima hacia el que quiero que vaya. El single de difusión, “Live”, refleja mucho una etapa de mi vida, ya que habla de un momento de liberación, de abrazar tus zonas oscuras soltando estructuras y miedos. Esta evolución tiene mucho que ver con de dónde vengo y dónde estoy ahora, hablando de mi etapa de Bandana y mi tiempo con Virgin Pancakes, hasta llegar a ser una mujer en la plenitud de sus 30 años.

Noticias: ¿Por qué decidieron que serían sólo ustedes dos?

Da Cunha: En realidad hay dos músicos más, los mismos que nos acompañaban en Virgin Pancakes, pero su rol es mucho más acotado. Hay mucho de electrónico en la música, entonces las voces están más adelante y el rol de cada uno cambió por completo. Yo ya no soy un pibito más, que se pone bermudas y zapatillas.

Noticias: ¿Cómo es trabajar con su hermano?

Da Cunha: La gente se pone mal cuando discutimos, y no se da cuenta de que en realidad es parte de nuestra relación. Tenemos criterios bastante diferentes; de hecho, fue un gran desafío encontrar algo que a los dos nos guste. Durante muchos años yo me adapté más a él, permitiendo que mi voz sea un instrumento más en la banda. Me la banqué y fue mi momento de crecimiento vocal, pero ahora quise pelear por mi lugar y él también se animó a mostrarse como cantante. Pero incluso peleándonos, nunca pensamos en separarnos. Quizás porque no permitimos nada que nos afectara como familia…

Noticias: Cuando estuvo con Bandana la explosión fue inmediata, y tras la separación cada una debió hacer su camino con otros recursos y otra repercusión. ¿Se sintió desprotegida?

Da Cunha: Para mí fue un desafío alucinante. No lo sufrí en absoluto, me sentí libre. Si bien Bandana era algo que yo quería, después de 3 años de obedecer instrucciones, se tornó asfixiante y agotador. Aprendí mucho y llegó un momento en el que quise aplicarlo, y en ese marco no podía. Así que me aboqué a mi formación y a volver a mí; necesité meterme para adentro después de tanta exposición. Me fui de viaje, me teñí de morocha, estuve en Grecia trabajando de barwoman. Como toda ruptura, una vez que te soltaste todo lo que queda es ir para adelante.

Noticias: Y cuando hoy le recuerdan su paso por Bandana, ¿le aburre referirse al tema?

Da Cunha: No, me parece una etapa alucinante de mi vida, gracias a la cual hoy estoy sentada acá. Fue un antes y un después, pasé de ser una nena estudiando Comunicación Social en una universidad a convertirme en parte de un negocio gigante. Lo que aprendí no tiene precio y estoy eternamente agradecida. Sí me da fiaca cuando estoy en la calle y a la gente lo único que se le ocurre decir es “dance, dance, dance”. ¡Por lo menos cambiá de canción, hubo otros hits! (ríe). Me gustaría que así como yo crecí y maduré, la gente pueda entender que esto realmente tiene que ver conmigo y lo otro fue una oportunidad que me dieron.

Noticias: Se casó muy joven, ¿cómo acompaña su marido esta nueva etapa?

Da Cunha: (silencio) Me separé hace un mes. No lo sabe casi nadie, porque no lo había contado hasta ahora.

Noticias: Uh. Tema complicado.

Da Cunha: Está bien… Pero justamente por eso venía hablando antes de una liberación total. Hoy estoy dedicada a mi trabajo por completo, sin límites. No sé que va a ser de nuestra relación. Después de 6 años con él, esto es una crisis y no sé adónde nos llevará.

Noticias: ¿Hubo un detonante?

Da Cunha: No, si realmente supiera por qué me separé, tal vez lo hubiera solucionado. Supongo que con el tiempo me daré cuenta y veré qué significa y si podemos volver o no. Por ahora toda mi energía está puesta en el trabajo y estoy disfrutando mi soledad y mi libertad.

Noticias: ¿Cómo es, entonces, su vida hoy cuando baja del escenario?

Da Cunha: Soy muy disciplinada y autoexigente. Me levanto temprano, hago mis respiraciones, mando mails o escribo, voy al gimnasio, tengo reuniones a la tarde… Soy muy artífice de todo lo que hago, aunque controle todo al punto de enfermarme.

Noticias: ¿Es perfeccionista?

Da Cunha: Demasiado. Además, con Virgin Pancakes me acostumbré a ponerme todo al hombro. Quisiera aprender a delegar, porque al final estoy siempre estresada y no disfruto nada. Aun estando en el escenario, estoy pensando si los chicos que me están esperando en la puerta entraron, en el sonido, en el público…

Noticias: ¿También es así en lo personal?

Da Cunha: Sí. Todo tiene que tener un resultado productivo, no puedo hacer nada porque sí. Es un gran problema, pero lo estoy tratando de cambiar. Por caso, dejé clásico y me pasé a kick boxing y dejé jazz y comencé hip hop. Son disciplinas más sueltas y no tan rigurosas…

Noticias: ¿Este cambio también se refleja en su estilo al vestirse?

Da Cunha: Sí, fui cambiando… Cuando estaba con la banda tuve una etapa surfera y rebelde. Me apasioné con ese estilo de vida y me vestía con jeans gigantes y buzo con capucha y nadie sabía cómo era mi cuerpo. Es que venía de Bandana, donde me querían encasillar como la Barbie del grupo, y yo odio el rosa... Pero de a poco volví a entrar en contacto con mi femineidad, volví a usar tacos y a sentirme más atractiva.

Noticias: ¿Hoy el juego de posar le divierte?

Da Cunha: Sí, me fascina. Estoy desplegando mi sensualidad por completo. Si bien siempre me cuido de no estar cerca de lo ordinario y soy bastante fóbica con eso, trato de experimentar. Con V creo que encontramos la unión entre lo sutil y lo sexy, de la mejor manera.

por Vicky Guazzone

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