Tuesday 16 de April, 2024

RESTAURANTES | 13-07-2012 14:44

Danzón Reloaded

“Gran Bar Danzón”. Libertad 1162. 4811-1108. Lunes a viernes a partir de las 19, sábados, domingos y feriados desde las 20. $ 200.

Bastión de la noche “cool” porteña desde hace 14 años, la clave del éxito ininterrumpido de este bar-restaurante es que ha sabido adaptarse a los tiempos. Cuando abrió sus puertas en 1998, su dueño, el empresario gastronómico Luis Morandi, advirtió un nicho de mercado en el furor del vino argentino y así creó El Danzón, como le dicen los amigos, uno de los primeros Wine Bars de la ciudad. Esta propuesta continúa, ahora con la extensa carta de vinos en una tablet donde se puede navegar un rato en busca de la etiqueta perfecta o simplemente aceptar la sugerencia de la encargada del Wine Bar, Fernanda Fazecas.

Pero a pesar de que el vino sigue teniendo un lugar de privilegio, los furores cambian. Ahora es el turno de la coctelería de autor, que cada vez pisa más fuerte en Buenos Aires, y en este aspecto Morandi también supo adaptarse a los tiempos que corren, poniendo a cargo de la barra al joven bartender Ciro Giménez Tarquini. A los tragos clásicos, Ciro les suma toques personales (gimlets de mandarinas y cerezas al oporto con gelatina de jengibre y manzana) y presentaciones originales (el Sushi Mary, casi una obra de ingeniería, con una rodaja de roll sostenida sobre una hoja y el Torino Julep, servido en la base de un shaker).

El trago es primero porque, a simple vista, El Danzón es un bar. Al entrar uno encuentra gente bebiendo de pie, principalmente profesionales, hombres y mujeres de edad promedio 40 años, en un espacio amplio, sin divisiones, con una larga barra y el Wine Bar sobre la pared principal. Pasada la multitud, junto a las ventanas que dan a la calle, se descubre el restaurante. La iluminación baja y el espacio ajustado nos recuerdan que seguimos en el mismo lugar, pero gracias a los milagros de la acústica, uno puede sentarse a comer y conversar tranquilamente. La cocina tampoco es, en absoluto, una cocina de bar. El chef Aldo Benegas propone una carta de comida elaborada, con entradas como el hiperfrutado ceviche de salmón y lenguado en caldo de mandarinas y jengibre con sorbet de apio y manzana verde; o las mollejitas de cordero doradas con crema de alubias, hinojos caramelizados y quinotos confit. En los platos fuertes predominan las carnes en cocciones lentas, como el confit de pato crocante con puré de zanahorias especiado, reducción de arándanos y balsámico y pistachos salados; pero también hay pescados, pastas y un excelente risotto blanco, con asado braseado al Malbec, cremosísimo y hecho en el momento. El chocolate es el rey de los postres (tarta de chocolate y toffee, tres postres de chocolate, fondant de chocolate tibio), pero tiene otras sabrosas sorpresas, como la tarta tibia de nueces pecan y peras, con helado de vainilla.

Un restaurante es una experiencia donde se combina el ambiente, la comida, la bebida y la compañía. En ese sentido, El Danzón es único. Lo tiene todo, incluso la compañía, si pasa un rato antes por el bar, pero eso depende de usted.

por Fernando Vidal Buzzi

Galería de imágenes

En esta Nota

Comentarios