Friday 29 de March, 2024

CLáSICA | 30-08-2013 12:25

Pinchas Zukerman en un trío insuperable

Recital de Pinchas Zukerman (violín), Amanda Forsyth (chelo) y Angela Cheng (piano). Obras de Schumann, Kodály y Mendelssohn. Templo Amijai.

Visitante asiduo de la ciudad, Pinchas Zukerman regresó una vez más a Buenos Aires para presentarse junto a dos integrantes de su ensamble de cámara, “Zukerman Chamber Players”. El concierto comenzó con dos obras de Schumann. Zukerman abrió la presentación con las “Tres romanzas para violín y piano, op.94”, junto a Angela Cheng. Y, luego, Amanda Forsyth se unió a Cheng para interpretar “Adagio y Allegro para chelo y piano, op.70”. Ambos dúos plasmaron sutilmente el lirismo de estas piezas, que funcionaron como cálido preámbulo para lo que habría de llegar.

El final de la primera parte del concierto, con el “Dúo para violín y chelo, op.7”, de Kodály, fue una muestra contundente del talento apabullante y de la evidente química entre Zukerman y Forsyth, matrimonio en la vida y frecuentes compañeros en el quehacer musical. La obra de Kodaly sonó electrizante en manos de este dúo, que realzó magistralmente el carácter rapsódico y contrastante de la pieza.

“El Trío Nº1 en re menor, op.49”, de Mendelssohn, que se escuchó después del intervalo, permitió apreciar al ensamble a pleno. Es sabido que Zukerman es un violinista extraordinario, pero sus compañeras se revelaron, también, como dos instrumentistas fenomenales. Es, precisamente, la peculiaridad del temperamento de cada uno de ellos lo que enriquece el resultado final. La compenetración entre estos músicos es intensa, pero sus individualidades, se potencian, y nutren de frescura y naturalidad el discurso musical.

Fuera de programa, ante la calurosa ovación del público, el trío brindó una breve pieza de Fritz Kreisler, en una lectura tan etérea como exquisita.

por Margarita Zelarayán

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