Friday 29 de March, 2024

PERSONAJES | 16-09-2015 00:03

María Freytes: “Mi sueño es tener mi late night show”

Es panelista del debate de “Gran Hermano” y “Desayuno americano”. Asignatura pendiente y llegada casual a la tele.

Algunos textuales –aun fuera de contexto– la retratan sin photoshop. “Soy matemática, comercial y analista, pero siempre tuve una chispa creativa, un dualismo interno”, dice. Licenciada en Sistemas con un Máster en Ciencias Políticas y Economía, estudió en el Northlands –con Máxima Zorreguieta, aunque la reina consorte de Holanda es tres años mayor– pero a ese hemisferio cartesiano –virginiano para los astrólogos– lo desafía con el humor de su hemisferio derecho, repleto de intuiciones que plasmó en su blog (“Ya no está online”, aclara) o que publicó en “Fatigadas” (Editorial Planeta). El libro reactualiza consejos y verdades para mujeres modernas desbordadas por su multiplicidad de roles. ¿Artista del stand up, panelista, periodista? A ella le cuadra justamente lo de ser multifocal, multitask o simplemente múltiple, porque además de trabajar en el show business, tiene una vida. Está casada con Tomás Álvarez (43), padre de sus tres hijos: Simona (10), Borja (7) y Jaime (3). “Y aquí me planto”, declara firme y divertida. Multiplicada en facetas varias para atender frentes varios, dice que “hay que calibrar el GPS interno para lograr un punto de equilibrio”.

Noticias: ¿Cómo va ese calibrado?

María Freytes: Ciento por ciento a punto. Trato de moverme a mi velocidad crucero, que no es hacer la plancha. Hay gente feliz yendo a 70 por la vida y gente que va a 150 kilómetros por hora. ¿A qué velocidad soy feliz? Cuando mi vida está equilibrada. Si escuchás a tu cuerpo y decís: “Esto me tensiona, no va. Hay una vara que te anula –porque te mete presión– y otra que te estimula y te hace bien. A mí me hace bien ser mamá, me da mucho placer. Creo que es también porque tengo libertad para salir a trabajar y espacios para mi pareja y mis amigos. Es como hacer malabarismo con naranjas dándoles su lugar y evitando que se caigan.

Noticias: Tiene un familión, hay dos hermanas, cuñados, chicos…

Freytes: Sí. Somos tres hermanas; Camila (45), Damiana (42) y yo, las dos casadas y con hijos. La más grande vive en Miami y viene ahora por 40 días, son sus vacaciones. Cuando llegamos al día 40 ya nos dan ganas de mandarla de vuelta. ¡Quedamos extenuadas de tanta hermandad!

Noticias: Dijo que llegó a la tele por casualidad y colgó la actuación. ¿Cómo fue?

Freytes: Hacía ciencias pero estudiaba teatro con Carlos Gandolfo–mi gran maestro de vida– y escribía. Lo mío era una mezcla, pero como en la película “Slumdog Millionaire”, todo al final tiene un sentido y se ordena. Por esas casualidades –o causalidades– mi padre se volvió a casar con una mujer que tiene tres hijas y la más chica, Belén, se casó con Gastón Portal. En ese momento había cambios en “RSM” y Gastón le comentó a su mujer que le costaba encontrar el reemplazo de Maju (Lozano) y que le gustaría alguien con mi estilo. Nos conocíamos de estar los fines de semana y le divertían mis comentarios. Yo trabajaba en Telefe, en el área de nuevos negocios, pero Belén sabía que mi sueño era tener ¡mi late night show! (risas). Parece que empezó a mirarme con otros ojos y aunque no me encaró, me mandó a ver a un productor. Conocí a Mariana (Fabbiani) –muy abierta conmigo, que era la hermanastra de la mujer de su ex– y me dijo que me había ido muy bien en la reunión. Ahí pensé, típico: ahora que estoy casada, con dos hijos, relajada, las cosas se me dan. Del cagazo –hablando mal y pronto– me salió un herpes en el oído y estuve con vértigo 40 días. Al día 41 me llamaron para decirme: “Arrancás ahora”. Empecé de cero al lado de una grande como es Mariana. No hice el camino de la calle –¡en el buen sentido!– de empezar de movilera, pero hice otro camino y tuve suerte.

Noticias: ¿Cómo define tener suerte?

Freytes: Estar atenta, parada en el lugar correcto a la hora apropiada.

Noticias: Un significado muy oriental. ¿Viajó a la India?

Freytes: Sí, me fui a los veintipico, sola y de mochilera: fue uno de esos viajes inolvidables. En cuanto mis hijos estén más grandes me voy otra vez.

Noticias: ¿Hacer teatro es una asignatura pendiente?

Freytes: No. Pero haber estudiado significó salir de un paradigma, salirme de la cultura con la que me formé, abrirme y descubrir la diversidad. Estoy eternamente agradecida a Carlos.

Noticias: Ahora es panelista de “Desayuno Americano” con Pamela David y tiene su rol en “Gran Hermano”. ¿Se siente cómoda en los dos casos?

Freytes: En “Desayuno…” estoy hace un año y medio, y en “Gran Hermano” unos tres meses. Fui acomodándome a los requerimientos. Pero creo que el rol que hace falta es el del sentido común, el de la visión conciliadora. Como panelista es muy fácil juzgar y que lo que digas sea grandioso. Pienso que no se puede perder de vista que estás hablando de una persona que merece respeto.

Noticias: ¿Un ejemplo?

Freytes: Se habla de la sexualidad de un participante, y para mí, al único que le compete es a ese individuo. Si está definiéndola, tiene que ser él o ella quien decida cómo y cuándo hablar del tema. Por eso está bueno el debate de “Gran Hermano”.

Noticias: Está bueno si cumple una normativa en tanto resulte ordenado y respetuoso. No suele serlo. ¿Cómo se siente en ese contexto?

Freytes: No. No me hallo. Me llamo a silencio.

Noticias: ¿Y la producción no le objeta el quedarse callada?

Freytes: Hasta ahora no. Pero estoy dispuesta a recibir la crítica o a que me saquen del programa. Por el momento estoy. De “Intratables” me fui porque el horario complicaba mi esquema familiar. Y a pesar de que el clima podía ser hostil, a mí me divertía mucho; me gusta más la política y la actualidad que la farándula y el chimento.

Noticias: ¿Es una persona positiva?

Freytes: Absolutamente. Rescato siempre lo bueno de lo que sucede. Lo que no me gusta de mí, trato de corregirlo y lo que no me gusta del otro, lo dejo en la limitación del otro. Detecto a las personas tóxicas y no permito que entren a mi círculo. Soy fácil para laburar, no es difícil llevarse bien conmigo pero no por una postura. Es porque dejo tu mambo en vos o sé poner un muro. Y voy más allá sólo si es una amiga.

Noticias: ¿Y optimista?

Freytes: ¡Sí! ¡Mi marido dice que no veo el vaso lleno sino siempre rebasado! (risas). Valoro mucho la alegría, la gente que va para adelante pase lo que pase. Uno puede tener bajones, claro, pero hay que seguir.

Noticias: ¿Para usted, lo mejor está por venir o ya vino?

Freytes: Laboralmente está por venir; familiarmente ya vino. Tengo que decidirme a poner primera en el trabajo.

Noticias: ¿Prepara “Fatigadas II” o se va a llamar “Hasta que la muerte nos separe”?

Freytes: No lo sé. Tengo mucho escrito pero suelto. Jaime es muy chico, me está costando sentarme a escribir. Eso sí que es una asignatura pendiente, hacer un taller de escritura. Estoy yendo a miles de stand-up y me dan ganas de hacer guiones. Pero mi gran contra es que funciono a punta de pistola. Cuando me llama una empresa para que haga un stand-up para tal fecha, ahí me pongo.

Noticias: ¿Conoce personalmente a Maitena Burundarena? ¿Siente que en sus observaciones hay cierta analogía con las de ella?

Freytes: No la conozco. La he leído, por supuesto. Si mis observaciones son parecidas, para mí sería un halago inmenso. Ella es un genio y tiene una forma muy inteligente de hacer humor. Muestra algo serio que te hace reír.

Noticias: Ha dicho que le interesa la política. ¿Se imagina conduciendo un programa político?

Freytes: Sí. Me gustaría hacer un programa tipo “El ángel de la medianoche” de Baby Etchecopar. Entrevistas a personalidades, no sólo políticos. Noticias: ¿Cuál es una de sus mayores preocupaciones como madre que vive en este país?

Freytes: Si a tus hijos le das la mejor educación pero crecen en una sociedad no educada, ¿de qué sirve? Me da pena por la sociedad sin opción de educarse y también por mis hijos. Vos nacés donde nacés, no elegís. Pero para mejorar no hay otra herramienta que la educación. Otra cosa que me preocupa es el diálogo entre los políticos, que son monólogos superpuestos. Me preocupa la poca capacidad para escuchar al otro. Y me duele que haya quienes quieran defenestrar al otro sin escuchar lo que piensa, cuando si lo hicieran quizás habría coincidencias. Ahora hay una valoración de la militancia y me parece perfecto; pero valoremos al militante que piensa y no al que grita para acallar al otro.

por Sissi Ciosescu

Galería de imágenes

En esta Nota

Comentarios