Friday 29 de March, 2024

POLíTICA | 21-09-2017 15:57

El INCAA contra el relato K y las pelis sin espectadores

El Instituto de Cine pide desarticular el discurso kircknerista que subsiste en sus espacios y canales. Del cine para los amigos a las listas negras.

En los últimos días el INCAA (Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales), lanzó varias medidas que regulan el manejo de las partidas en el financiamiento de películas y documentales (la resolución 942/2017 publicada en el Boletín Oficial esta semana), lo que disparó las críticas de las productoras chicas y medianas.

En el Instituto aclaran que el único objetivo es poner un corte a los manejos poco tranparentes en el otorgamiento de los créditos a las producciones, que hasta hoy dependían más de las comisiones que evaluan los proyectos.

"Esas comisiones están integradas por gente de la industria audiovisual y de los organismos culturales de todo el país, y fueron muy permeables en la pasada década a "producciones con taquilla inexistente o películas que acompañaban el relato", explican desde el organismo.

El enojo

Semanas atrás, mientras el presidente Mauricio Macri recibía a otros mandatarios sudamericanos en Mendoza para la “Cumbre de Jefes de Estado del Mercosur y Estados Asociados”, en la que el tema central era la desafiliación de Venezuela y la condena al régimen de Nicolás Maduro, en el Gaumont, principal sala entre los espacios INCAA, se estrenaba “Chávez infinito”, largometraje documental de María Laura Vásquez, una oda al fallecido artífice de la Revolución Bolivariana.

El teléfono de los principales directivos de la nueva administración del Instituto de Cine sonó insistentemente durante ese mediodía, con llamados desde la Jefatura de Gabinete y el Ministerio de Cultura.

Alternando el interlocutor el reclamo era más o menos el mismo: “nos están mojando la oreja”. Ese mismo día por la tarde, mientras las reuniones en Mendoza continuaban, los llamaron desde el Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos: “¿Están viendo Cine.ar? Están dando un documental de los montoneros que van a la escuela. No puede ser. Esto no puede seguir pasando...”.

La nueva cúpula del INCAA (del que depende la plataforma Cine.ar), que llegó en abril de este año para desplazar a los gerentes K que habían “resistido” durante el año de la administración de Alejandro Cacetta, atendió al reclamo. Y citó a los responsables de ambos espacios, otros que también “resisten”, para extender el reto.

La Resistencia K en el INCAA tiene justamente al Gaumont y la escuela de cine ENERC (que está sin rector desde abril cuando se le pidió la renuncia a Pablo Rovito por sospechosos manejos en los fondos), como bastiones. Y se niega a entregarlos: buscó en el último mes consensuar la tregua poniendo a otro de los suyos en la silla de Rovito, pero desde el INCAA de Cambiemos le bajaron el pulgar y llamaron a Concurso Público la semana pasada.

Relato

“Si es como vos decís y no tenés otra cosa para poner del último tiempo más que documentales de montoneros, levantá todo y programá algo más viejo de nuestro archivo, poné Los Bañeros más locos del mundo o Héroes”, escuchó uno de los programadores de Cine.ar de un directivo del INCAA que preside Ralph Haiek, amigo de la infancia de Mauricio Macri, y donde la nueva gerencia reconoce la paternidad de Marcos Peña. Haiek y elenco creen que las explicaciones del personal heredado son endebles, y que lo único que hacen es “sostener su relato”.

Algunos reconocen sin embargo que durante la “década ganada”, buena parte de lo que se financió desde el Instituto de Cine, sobre todo en el rubro documental, tenía que ver con una misma línea política (el archivo es todo K, se quejan de “la pesada herencia”).

Y recopilan una lista de cien títulos que responden a esa línea: las películas de relato. Entre esas cien, una veintena hace referencia directa a Perón o Eva desde el nombre. Y entre las más beneficiadas económicamente aparecen productoras vinculadas a Fernando Sokolowicz (dueño de Página/12); el referente del Movimiento Evita Fernando "Chino" Navarro; y el publicista montonero Jorge “Topo” Devoto, divorciado de Liliana Mazure, presidenta del INCAA durante el kirchnerismo.

A Mazure (hoy diputada nacional por el FPV) y Lucrecia Cardoso (su sucesora en 2014), a Rovito, y los ex gerentes Raúl Seguí, Rómulo Pullol y Juan Zaffanella, los denunció penalmente el Gobierno nacional a través de la Oficina Anticorrupción por los supuestos delitos de "defraudación por administración fraudulenta" y "defraudación contra la administración pública".

Y a la lista de acusados en la causa que ahora tienen el juez Daniel Rafecas y el fiscal Guillermo Marijuan, se sumó Cacetta, el ex director de Patagonik Film Group que en 2015 había sido nombrado como presidente del INCAA por Pablo Avelluto, y al que el Ministro de Cultura obligó a renunciar el 12 de abril porque "no quiso combatir la corrupción".

Mazure y Cardoso también son investigadas por “abuso de autoridad y violación de los deberes de los funcionarios públicos” por el juez Claudio Bonadio y el fiscal Carlos Rívolo.

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