Sexy y mediática, Jésica Cirio, representa el arquetipo de una nueva generación de mujeres que acompañan a políticos y empresarios. Les dan brillo y los rejuvenecen. Pero… ¿cuál fue el papel de las esposas a lo largo del siglo XX?
Años 50. Militancia y glam. Eva Duarte de Perón se convierte en el emblema de lo femenino: esposa militante de perfil alto y mujer glamorosamente elegante.
Años 60. Ausencia femenina. María Emilia Green Urien, la mujer del dictador Juan Carlos Onganía, fue el exponente de la “esposa de” que imperó en la época: silencio total.
Años 70. Mujer títere. María Estela Martínez de Perón llega a la presidencia, aunque su poder se vio absolutamente influido por el manejo externo de su entorno.
Años 80. Amas de casa. El protagonismo, en manos de los hombres. La mujer era el “ama de casa” que solo acompaña, como lo fue Lorenza Barrenechea, la esposa de Alfonsín.
Años 90. Frivolización. La llegada del menemismo hizo que las “esposas de” ganen lugar en el poder. Dan los primeros pasos hacia la frivolización. Un ejemplo: María Julia.
Nuevo siglo. La crisis de 2001 dejó a la clase dirigente la enorme tarea de reconstruir el espacio institucional y político. Ya no hay lugar para el glamour y la frivolidad. Así, aparecen las mujeres super militantes que destacan por mostrarse activas en el trabajo e independientes de sus hombres.
En la actualidad, políticos y empresarios las buscan voluptuosas y con una fuerte exposición mediática. Qué les aportan:
Luciana Salazar. Su romance con Martín Redrado fue una sorpresa para el perfil de ambos. Él venía de dejar el Banco Central enfrentado con CFK y saltó a las revistas del espectáculo. Ella dice que lo “humanizó” y le sacó frialdad.
Victoria Vanucci. Se enamoró de Matías Garfunkel cuando él buscaba levantar su perfil. Hoy lidera una fundación benéfica, al estilo Eva. Ella lo ayuda con su manejo mediático: él busca acercarse a la campaña de Daniel Scioli.
Pamela David. Dice que durante meses rechazó las invitaciones de Daniel Vila, su jefe en América. Tiene 25 años menos que él y asegura que le elige la ropa y que él busca su aprobación antes de salir a la calle. Oficia de anfitriona en tevé y en los encuentros que organiza el empresario.
Ingrid Grudke. Cristóbal López era famoso por ser desconocido: evitaba mostrarse ante los medios y prefería la tranquilidad de la Patagonia. Junto a Grudke adquirió un perfil más accesible: fiestas familiares, vacaciones en Cataratas y recitales de Pimpinela.
Una nueva generación de mujeres parece estar abriéndose paso en el escenario sociopolítico del país. Mediáticas, jóvenes y sexies, aportan brillo y blanquean imágenes. ¿Estrategia de marketing o un síntoma de los tiempos que estamos viviendo?
En NOTICIAS de esta semana "Jésica Cirio y las nuevas mujeres del poder". Qué ganan a cambio. El amor y los negocios de Cirio al ritmo de la campaña electoral.
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