Entretelones de la pelea entre Aníbal Fernández y Axel Kicillof
El ministro de Seguridad y el gobernador bonaerense en dos lados de la grieta que divide al Frente de Todos.
Aníbal Fernández no tolera a La Cámpora. Es una distancia que nace casi de una cuestión de piel -hay que recordar que él que viene de la vieja guardia del peronismo-, pero que sin duda se vio agravada por la campaña del 2015. Al día de hoy, siete años después, el actual ministro de Seguridad sigue pensando que “los chicos” le jugaron en contra en la elección bonaerense.
Pero todo esto sucedió hace mucho. Sin embargo, los cruces entre Fernández y el kirchnerismo van en aumento. A pesar de que Aníbal siempre fue un hombre cercano a Cristina Kirchner, desde que asumió la cartera se enroló bajo el ala de Alberto, y desde ahí protagonizó varios cruces. Ahora, en una entrevista, trató a La Cámpora de una “calamidad” con la que tuvo que lidiar su amigo, a la altura de la pandemia y la guerra. Hay que tener en cuenta que el ministro es uno de los pocos que insiste con la reelección del Presidente.
A esta escalada se le sumó la guerra de cruces con el gobernador bonaerense. Con la inseguridad escalando en la Provincia, el ministro decidió enviar un comando de fuerzas a Buenos Aires. Eso provocó críticas airadas tanto de Axel Kicillof como de su ministro de Seguridad, el siempre polémico Sergio Berni. “Aníbal, con Buenos Aires no se jode”, lanzó el médico y soldado, entre otros dardos. “Muchachos, si están viendo otro canal yo no tengo la culpa”, devolvió Aníbal.
Incluso el propio gobernador se sumó a la polémica, y aseguró que Nación le retaceaba el envío de gendarmes. De fondo, se asoma sobre esta batalla la pelea por las elecciones. Kicillof ya manifestó sus intenciones de competir por la reelección, pero tiene un escollo nada menor: el grueso de los fondos que tiene para gestionar provienen de los que le envía la Nación. ¿Hasta dónde puede, en plena campaña electoral, chocar contra el Presidente y los suyos? Scioli, otrora gobernador, tuvo que hacer una campaña con el kirchnerismo en contra -entonces en la Presidencia- y así terminó.
También te puede interesar
-
La política exterior de Milei: caprichos y fantasías místicas
-
La comparación entre Jorge Macri y un personaje de Capusotto
-
Kicillof sin escenario y la interna del peronismo
-
Troskopoints: Rebord se burló de quienes asisten a las marchas
-
Corrupción K: el juicio en el Caso Skanska
-
Facundo Manes: "A mí no me adoctrinó nadie"
-
Gabriel Bornoroni, el mimado de Karina Milei
-
Mario Russo, el ministro "gauchito"
-
Marcos Galperin, el puntero fintech
-
Daniel Angelici: “Si fuera senador, aprobaría el nombramiento de Lijo”