"Al teatro se viene a pensar”, afirma Darío Lopérfido, director artístico del Colón y del Festival Internacional de Buenos Aires. “En esta décima edición, busqué mostrar estéticas escénicas que sirvan como disparadoras y provoquen polémica”, confiesa. “El peor espectáculo no es aquel que está mal hecho sino el que más pronto se olvida. Incluso me gustaría que los espectadores se enojen conmigo, porque todo cuestionamiento ayuda a perfeccionarnos”, señala.
La intensa actividad teatral, por toda la ciudad, va desde el 17 de septiembre al 4 de octubre. Un ineludible encuentro bianual que siempre despierta interés. “El populismo kirchnerista de los últimos años transformó todo en discusiones binarias –continúa el creador de este evento en 1997– y acható lo positivo que puede generar una discusión. O se está a favor o en contra. Lo sensato es poder disentir pero evaluar el hecho artístico con un café de por medio”, sostiene.
Los visitantes. La programación internacional incluye propuestas de España, Sudáfrica, Alemania, etc. Por ejemplo, el belga Ivo van Hove a cargo de la compañía holandesa Tonnelgroep presenta “Opening Night”, basado en la película homónima de John Cassavetes. Su compatriota Jan Lauwers ofrece creaciones de carácter multidisciplinario: “Isabella’s Room” (con entrada gratuita, en Parque Centenario), sobre una mujer no vidente; y “The blind poet”, que indaga en la pluralidad cultural mundial.
Los australianos de Back to Back Theatre, integrada por actores con discapacidades, brindan “Ganesh versus The Third Reich”, el viaje imaginario del Dios hindú para enfrentar al mismísimo Hitler. Francia despliega en Parque Sarmiento la imponente puesta multimediática “A fleur de peau” del Groupe F y la polémica “Gólgota picnic” del argentino Rodrigo García por el centro Dramático de Montpellier.
“Estratificar espectáculos por género es un concepto arcaico. El cruce de disciplinas expresivas en la búsqueda de reflexión ahora es fundamental”, asevera Lopérfido. “Cuando asumí la dirección del Colón, el noventa por ciento de la actual grilla extranjera ya estaba definida; por eso, puedo aprovechar la sinergia y aquí veremos 'Macbeth', una versión sudafricana de la ópera de Verdi, concebida por el director Brett Bailey, quien traslada el drama shakesperiano al ámbito de refugiados congoleños”, explica.
Latinoamérica se hace presente con “Antigonón” de Cuba, donde actrices y bailarines escenifican versos y textos de su realidad. Mientras Chile trae “Castigo”, puesta del ascendente Cristian Plana, basado en una novela de Strindberg. Perú mostrará “La cautiva”, donde una joven sufre la violencia del Estado represivo. “El festival no es un mundial de fútbol donde tienen que participar determinados países, elijo lo que más impacta”, aclara.
Los locales. En la programación nacional, a cuya selección de 16 títulos se postularon 470, conviven desde un consagrado Ricardo Bartís hasta el promisorio Ariel Gurevich. “Estoy agradecido a Carolina Prieto, Andrea Servera y Alejandro Ullúa por su criterio curatorial de incluir mayoritariamente nuevos y talentosos creadores locales. Nosotros no elegimos por cómo se piensa sino por lo que se hace. Sembramos para el futuro”, concluye Lopérfido.
Aún se pueden adquirir entradas a través de festivales.buenosaires.gob.ar o personalmente en los teatros Colón, San Martín, Regio o Casa de la Cultura. Hay abonos para cinco obras internacionales más una gratuita, todas con ubicaciones en platea.
*Crítico de Teatro de NOTICIAS.
por Jorge Luis Montiel
Galería de imágenes
Comentarios