Acompañar en el primer empleo: motor de inclusión y desarrollo para los jóvenes

El primer empleo formal para un joven de un entorno vulnerable no es simplemente un trabajo: es la puerta de entrada a un proyecto de vida. Es la oportunidad de demostrar lo que sabe, de aprender y de empezar a construir un futuro con sus propias manos. Más allá del salario, significa autonomía, responsabilidad y la posibilidad de proyectarse. Es el momento en que comienza a forjar su identidad profesional, adquiriendo confianza en sus capacidades y aprendiendo a transitar las complejidades de un entorno laboral real.

En la Argentina, donde apenas 3 de cada 100 jóvenes de barrios vulnerables accede a un empleo registrado, tener la oportunidad de un trabajo formal puede cambiar el rumbo de la vida. Muchos son los primeros en sus familias en dar ese paso y se enfrentan a un camino lleno de desafíos: desde adaptarse a nuevas reglas hasta comprender cómo desenvolverse en un ambiente profesional desconocido. Sin acompañamiento, esas dificultades pueden derivar en frustración y renuncias prematuras, perdiéndose una oportunidad clave para su desarrollo.

Ahí es donde el acompañamiento marca la diferencia. En Fundación EMPUJAR trabajamos para que cada joven no sólo acceda a su primer empleo, sino que logre sostenerlo y crecer en él. Lo hacemos combinando formación en habilidades blandas, seguimiento cercano y herramientas que les permitan desarrollarse en el trabajo y en la vida cotidiana. Cada pequeño logro se convierte en un escalón hacia su crecimiento personal y profesional.

El rol de las empresas es determinante. Más allá de ofrecer vacantes, tienen la posibilidad de generar un impacto real acompañando a los jóvenes en su proceso de aprendizaje, brindando feedback y construyendo entornos de confianza que potencien su compromiso. Este acompañamiento es clave para que un empleo inicial se transforme en un proyecto de futuro.

Cuando compañías comprometidas se suman a programas como los de EMPUJAR, la combinación de esfuerzo, formación y apoyo genera resultados transformadores: los jóvenes alcanzan estabilidad, adquieren herramientas para crecer y empiezan a proyectar grandes metas, mientras las empresas fortalecen sus equipos con talento motivado, preparado y con propósito. Nuestra misión es ser el puente que conecta a ese talento joven con organizaciones dispuestas a apostar por él, creando oportunidades que van mucho más allá de la mera inserción laboral.

Apostar por el empleo formal y acompañar a quienes dan su primer paso es una estrategia decisiva para construir un futuro más justo y equitativo. Sostener ese inicio y acompañar el camino convierte las oportunidades en historias de desarrollo, talento y cambio social.