No me molesten, estoy de vacaciones”, dijo José Luis Manzano y volvió a instalarse en un camastro en su casa que da a la playa La Posta del Cangrejo, en Punta del Este. El ex funcionario menemista, reconvertido en empresario y ariete kirchnerista en la guerra total contra el Grupo Clarín, quería renovar energías para un año arduo. Dedicaba horas a leer al sol. NOTICIAS lo descubrió leyendo una nota sobre el romance entre el diseñador Carlos Di Doménico y el ex funcionario K, Juan Manuel Campillo, publicado en esta revista, en enero. Tras el descanso, el martes 7 reapareció en las arenas que más le gusta frecuentar: se sentó en las primeras filas del acto en la Casa Rosada, donde la Presidenta habló sobre Malvinas. Manzano aplaudió una y otra vez, junto a Daniel Hadad y cerca de otro competidor del rubro, Sergio Szpolski.
Junto a su socio Daniel Vila, Manzano ha sido clave en el plan del Gobierno para avanzar sobre el más preciado interés económico del Grupo Clarín. A fines del 2011, lograron la intervención judicial de la firma CableVisión y quieren erigirse como un jugador de peso en el negocio del cable, con la venia del Gobierno.
Manzano y Vila controlan el canal América -y su cable América24-, la radio La Red y una red de diarios del interior que incluyen La Capital de Rosario y diario UNO de Entre Ríos, Mendoza y Santa Fe. Luego de un enfrentamiento -principalmente de Vila- por la sanción de la nueva Ley de Medios, en el 2009, el grupo mediático comenzó a tejer un regreso hacia el oficialismo hasta embarderarse en la cruzada oficialista contra Clarín. Manzano fue el encargado de limar las asperezas en sucesivas visitas, actos y reuniones con la Presidenta. Y terminó de seducirla con su plan de avanzar judicialmente contra CableVisión, algo que despertó el interés del Gobierno. Con ello, el ex ministro del Interior de Carlos Menem -quien en los '90 forjó una amistad con el entonces gobernador Néstor Kirchner- recuperó un lugar privilegiado en el reparto de pauta oficial que utiliza el Gobierno para premiar amigos y castigar a los medios críticos.
Pauta millonaria. El regreso de Manzano a las huestes K se refleja directamente en los números oficiales de propaganda a los que accedió NOTICIAS. Las empresas de Vila y Manzano pasaron de facturar 5.307.493 pesos en el primer semestre del 2010 a 35.877.062 pesos en el mismo período del 2011, de acuerdo a lo informado por la Jefatura de Gabinete, los últimos datos oficiales disponibles de pauta publicitaria del Gobierno nacional. Es decir: el grupo mediático de Manzano y su socio recibió un 576% más en pauta, de un año a otro. América y la señal de cable A24 representan el crecimiento más radical: recibieron poco más de 30 millones de pesos para el mismo período, a razón de 5 millones por mes.
Tanto en el canal América como en la radio La Red, Manzano y Vila están asociados al diputado opositor Francisco de Narváez que, luego de una disputa feroz con sus socios por el giro oficialista del multimedios, se alejó de la gestión. Los gerentes del canal que le respondían fueron desplazados y su voz perdió peso. La nueva ley prohíbe a funcionarios públicos ser dueños de medios. Las acciones de De Narváez están, en los papeles, a nombre de su hijo.
Una consultora de medios privada estimó que, por el total del año pasado, el grupo UNO y sus empresas habrían recibido más de 80 millones de pesos en pauta oficial. La cifra, a priori, parece conservadora, habida cuenta de que se presume una fortísima inyección de fondos en el segundo semestre del 2011, que coincidió con el período de la campaña electoral. Tanto el secretario de Medios, Alfredo Scoccimarro, como el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, se resisten a dar a publicidad los números de la segunda mitad de año.
América promedió 4,7 puntos de rating en el 2011 y quedó cómodamente como el canal privado con menos audiencia detrás de El Trece (10,1), Telefe (9,9) y Canal 9 (5,1). El reparto de la pauta no se guía por las audiencias. La emisora líder del Grupo Clarín y su señal de cable TN recibieron apenas 1.018.320 pesos en el primer semestre del año pasado, 30 veces menos que los canales de Vila y Manzano.
Relax. Manzano dedicó sus vacaciones a su familia e intentó pasar casi cuarenta días de relax. Su sonrisa no dejó de acompañarlo incluso en el sinnúmero de veces que rechazó los pedidos de entrevista de NOTICIAS. El mendocino también hizo de anfitrión: recibió una breve visita de su socio Vila junto a su novia Pamela David. La pareja debió abandonar raudamente la casa de La Posta del Cangrejo al enterarse del fallecimiento de la madre de Vila, quien partió entonces hacia Mendoza. Pero antes de la mala noticia, hubo tiempo para compartir un asado. Un empleado de la familia se hizo cargo de la parrilla. Tomó unas hojas de diario y encendió el fuego. Nadie notó la casualidad: las páginas de Clarín ardieron en la casa de Manzano. Una curiosa imagen para el deleite kirchnerista.
por Daniel Seifert
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