Veinte años atrás de que el escándalo de los aportantes truchos a la campaña llenara de preocupaciones a Cambiemos, Mauricio Macri le hacía a NOTICIAS una revelación que en la actualidad sería una bomba.
Era enero de 1998 y el ahora Presidente de la Nación decidía los designios del Club Atlético Boca Juniors. Si bien no había incursionado en política, el bicho ya le había picado: “Ahora, su padre ya no necesita invertir más en políticos extraños. Tiene en potencia uno en la familia…”, le dio el pie el periodista de NOTICIAS. Y el entonces empresario se despachó: “Ah sí, ahora va a poder ahorrar, pero más que inversiones se ahorra mangazos…”.
Atento a su respuesta, el periodista repreguntó: “¿Le piden mucho dinero los políticos a los empresarios?”. Y allí vino la respuesta de Macri que hoy sería tomado como una confesión: “Y claro que sí, más vale ¿si no de dónde sale la plata para las campañas? También sale del Estado, por supuesto, pero una parte muy importante sale de los aportes de los empresarios privados”.
Luego, el ahora presidente comentaría que votó a Menem en el 1995 porque “Argentina recuperó ese hliito tan delgado que es la estabilidad”, pero que no le parecía adecuado que se volviera a presentar en el ’99.
Este año, estalló la denuncia sobre cómo financió Cambiemos su campaña. La Justicia detectó que el macrismo inscribió al menos unas siete mil personas, muchas de las cuales tenían planes sociales, como aportantes, aunque no habían puesto dinero.
El Macri de hace 20 años atrás ya había develado de dónde venían esos “fondos negros”. El Presidente, aún no se pronunció sobre el tema.
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