Pedro Castillo tiene 51 años, es profesor de primaria y magister en Psicología Educativa, y adquirió notoriedad en 2017 al ponerse al frente de una huelga de profesores en varias regiones del país, que se extendió por 75 días para exigir la recomposición salarial de los maestros peruanos.
Favorito en las encuestas de cara a la segunda vuelta de las presidenciales, previstas para el domingo 6 de junio, Pedro Castillo aventaja por 42% a 21% a Keiko Fujimori, hija del ex presidente, su retadora en el ballotage que definirá al próximo mandatario en Perú, país sacudido por los escándalos políticos de corrupción.
Perú contabiliza 6 presidentes acusados de corrupción en distintos derivados del Lava Jato y las coimas pagadas por la subsidiaria local de Odebretch, en los que también se ha visto implicada Fujimori. Razón por la cual buena parte del electorado se inclina por un candidato que promete una revolución.
Pedro Castillo, candidato de Perú Libre, partido que tiene como logo un lápiz, se define como de izquierda marxista. Su bastión está en el norte del país, de donde es oriundo: nacido en Cajamarca y exrondero (miembro de las rondas campesinas, organizaciones comunales de autodefensa), Castillo lleva el debate al Perú profundo, alejado de Lima.
El pasado 11 de abril, día de las elecciones primarias, dejó la foto de la jornada al llegar a votar a lomo de caballo a una escuela en Tacabamba, en la provincia de Chota, en Cajamarca, a 900 kilómetros de la capital. Y allí se desarrollará el primer debate presidencial con Keiko Fujimori, a quien han apoyado por su parte los tradicionales partidos de derecha y centro en Perú, preocupados por la llegada de este outsider.
Encuestas
El candidato presidencial de Perú Libre sería el más votado (41,5 por ciento) en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales peruanas, muy por delante de su rival de Fuerza Popular (partido de la ultraderecha), Keiko Fujimori (21,5 por ciento), según una encuesta del Instituto de Estudios Peruanos (IEP).
Estos datos confirman el favoritismo de Pedro Castillo con vistas a la cita electoral del 6 de junio. El estudio, publicado por el diario La República recoge además que un 21,2 por ciento del electorado votaría blanco o nulo, un 13,5 por ciento aún no estaría decidido, y un 2,2 por ciento no iría a votar.
Paradójicamente Pedro Castillo consigue mayor intención de voto en la región sur y centro del país: 54,7 y 45,8 por ciento, respectivamente. En el caso de Keiko Fujimori, su mejor respaldo se encuentra en el norte y el centro, con 19 y 14,8 por ciento, respectivamente.
En el caso de Lima, el candidato presidencial de Perú Libre obtiene una preferencia de 29,3 por ciento y su contendiente de Fuerza Popular un 31,4 por ciento. Además, Pedro Castillo, alcanza un 49,4 por ciento de apoyo en el nivel socioeconómico D/E (los sectores más bajos), mientras que Keiko Fujimori llega a un 38,3 por ciento en el nivel socioeconómico A/B (los altos).
Baradel peruano
Castillo creció en popularidad como el Roberto Baradel peruano durante una huelga de profesores, y apareció para poner "el pecho por Perú" frente a la grave situación social que enfrenta el país, Durante la campaña prometió trabajar como presidente en "cómo llevar un pan al estómago, y cómo salvar a la población de este estado de emergencia".
El candidato de Perú Libre desbancó en poco tiempo a quien era la candidata presidencial natural del espacio de izquierda, Verónika Mendoza, y se presenta como una figura popular independiente de sus correligionarion, a quienes les recomendó que "se organicen" para hablar todos "un solo lenguaje".
Por su parte, Fujimori entiende la popularidad de castillo y su supremacía es la manera que ha encontrado buena parte del pueblo peruano de "protestar frente a la indiferencia del Estado que ha ocurrido durante años". "no son culpables de la polarización y la incapacidad de estos últimos gobiernos", expresó a la emisora RPP.
Y la candidata de Fuerza Popular les pidió a sus segiodores no empujar una "campaña del miedo" y "buscar coincidencias y no diferencias", para remarcarle a Castillo que aunque él se atribuya la defensa de los "peruanos más humildes", el fujimorismo "ha sido el Gobierno que más trabajó por los peruanos más humildes", en referencia a la Administración de su padre, el expresidente Alberto Fujimori.
Investigada
Fujimori sigue siendo investigada por el fiscal José Domingo Pérez en sus vínculos con el caso Lava Jato peruano. Y esto ha afectado notablemente su aprobación popular, en lo que Fuerza Popular ve también una intromisión de la justicia en la campaña.
"Hoy he visto que el Ministerio Público sacó un comunicado en el que solicita a todos los trabajadores mantener la independencia y objetividad, y espero que eso ocurra con el fiscal al que hacen mención", marcó Fujimori en relación con Pérez, que forma parte del equipo especial que investiga la trama de corrupción relacionada con la constructora brasileña Odebrecht.
Fujimori aseguró haber sido "respetuosa" con la investigación que se lleva a cabo en su contra por presunto blanqueo de capital, además de "cautelosa" a la hora de mencionar el caso en el marco de la contienda electoral. Y mostró su "sorpresa" por la intromisión del fiscal, apareciendo en los medios "cada vez que hay un momento importante de campaña". En su opinión, "Pérez busca convertirse en un personaje político".
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