Uruguay, Brasil, Chile, Paraguay, los Estados Unidos, Francia, Italia y más. Esos son algunos de los destinos en el exterior que eligió el candidato a presidente oficial, Daniel Scioli, para visitar en los últimos años mientras fue gobernador de la provincia de Buenos Aires. La mayoría los hizo en aviones privados pertenecientes a la empresa de un polémico piloto, Gustavo Carmona, que estuvo procesado por la Justicia junto a Ricardo Jaime en una causa en la que se investigó al ex funcionario K de recibir dádivas.
Los viajes surgen de los registros oficiales a los que accedió NOTICIAS en exclusiva. Y muestran el millaje que sumó el candidato durante su gestión en vuelos privados. En el sciolismo justifican las contrataciones y aseguran que los aviones con los que cuenta la provincia son viejos y no están aptos para hacer esos trayectos.
Volar. El 30 de abril pasado Scioli viajó a Paraguay en una misión oficial para reunirse con el presidente de ese país, Horacio Cartes. Alquiló los servicio de la empresa de taxis aéreos Fly Zar, propiedad de Gustavo Carmona y convertida en la principal proveedora de vuelos privados para la provincia de Buenos Aires. La empresa que administra Fly Zar es Servicios y Emprendimientos Aeronáuticos SA, la misma que quedó en la mira de la Justicia por haber pagado dos viajes a Ricardo Jaime. En esa causa Carmona fue procesado por el juez Claudio Bonadio, aunque luego se le dictó la falta de mérito.
El vuelo a Paraguay fue en un Lear Jet 60 con capacidad para siete pasajeros, además de los tripulantes. En ese viaje lo acompañó su círculo más íntimo de los negocios y la vida. Estaban Rubén Mousalli, un viejo amigo de la familia que conoce todos los secretos del gobernador, Luis Alberto Peluso y Juan Carlos Mancinelli, entre otros. Mancinelli es el presidente de Servicios Emiser SA, una de las adjudicatarias del dragado del Río Lujan, que se desbordó en las últimas inundaciones. Además, es familiar del DT del equipo de futsal del gobernador, La Ñata Sporting Club. Y Peluso es un funcionario de Scioli que fue echado de la gobernación por los escándalos que lo salpicaron en la Justicia. En el 2009 fue apartado de su cargo de interventor de Lotería y Casinos porque se lo investigó, entre otros temas, por no haber incluido en su declaración jurada de bienes una lujosa casa en Miami, y por operar una supuesta mesa de dinero ilegal en el casino flotante de Puerto Madero. Se lo señaló, además, como supuesto recaudador informal del gobernador. Pese a todo, Peluso es parte de la familia: es socio de Eladio González Rodríguez, el marido de la hija del gobernador Lorena Scioli, en el Real Hotel Luján.
En el mismo Lear Jet 60 Scioli también viajó a Brasil el 8 de abril para reunirse con el ex presidente Luis Inacio Lula Da Silva. Pero el Lear no es el único avión que usa. También se mueve en un Challenger 601 que tiene más autonomía y comodidades. Entran nueve pasajeros y puede volar por toda Sudamérica sin cargar combustible. Con ese avión fue hasta Brasil el 26 de abril y el 8 de diciembre del 2013, el 20 de septiembre del 2012, el 2 de octubre del 2010 y el 26 de octubre del 2011, tres días después de ser reelecto como gobernador de la provincia. También fue hasta Ecuador el 11 de febrero del 2014, estuvo en Paraguay el 21 de noviembre del 2013, viajó hasta Chile el 23 de agosto del 2012 y visitó Colombia el 21 de abril del 2012. Los acompañantes suelen ser de lo más variopinto: desde el médico Alfredo Cahe, su esposa Karina Rabolini, el empresario y millonario Matías Garfunkel, su asesor Lautaro Mauro, su secretario Julián Colombo y hasta la amiga de Rabolini María Teresa Garbesi.
Otro de los aviones que suele usar es un Hawker 4000 con capacidad para ocho personas. Con ese avión viajó a los Estados Unidos en diciembre del año pasado para dar una conferencia en la Fundación Bill Clinton y fue filmado cuando llegaba al aeropuerto, supuestamente por agentes de la ex SIDE que luego se encargaron de subir el video a las redes sociales.
Polémica. Carmona y su empresa figuran como proveedores de la provincia de Buenos Aires. “Nos presentamos a licitación y facturamos como corresponde. Pasamos los precios más competitivos porque además yo manejo los aviones porque soy piloto”, explicó Carmona a NOTICIAS. Lo cierto es que no siempre queda claro cuánto le paga la provincia al piloto. Por el viaje a Miami del año pasado en la provincia habían asegurado que pagaron 400.000 pesos aunque los operadores del mercado explicaron que ese vuelo podía costar entre 75.000 y 100.000 dólares. El precio despertó sospechas de subfacturación.
Además de los vuelos privados para las giras oficiales, Scioli suele usar aviones de línea para viajar a Italia y Francia, donde suele descansar y de paso hacerse revisar la prótesis de su brazo. Siempre en primera clase. Al menos esos los paga de su bolsillo.
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por Nicolás Diana
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