Hermanos problemáticos hay en todas las familias. Y las “reales” no son la excepción. Basta con recordar al príncipe Harry y sus excesos de drogas y alcohol o las fotos subidas de tono de la popular Pippa y James Middleton, hermanos de Kate. La familia de la reina Máxima Zorreguieta es un poco más discreta, aunque en los últimos días la controversia por la designación de su hermana Inés en un cargo público en el gobierno macrista llegó hasta Holanda, donde se habló de nepotismo en una gestión en la que Máxima tiene algunos amigos. La suspicacia se generó a raíz de que Inés no cumplía con todos los requisitos que le exigía el cargo, los que hasta hoy se habían mantenido en reserva por parte del Ministerio de Desarrollo de la Nación.
NOTICIAS pudo acceder a datos más específicos sobre el contrato de Inés Zorreguieta en el Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales, en el cargo de directora de Despacho y Mesa de Entradas de la Dirección General de Administración de la Secretaría Ejecutiva, un organismo que depende del Ministerio de Desarrollo Social a cargo de Carolina Stanley. Desde el Consejo Nacional contaron en exclusiva que la tarea de la joven es administrar información. Algunas de sus funciones son: coordinar y realizar la protocolización y comunicación de expedientes y proyectos de leyes; y el giro de documentación; supervisar el seguimiento de los trámites, entre otras. El requisito que no cumple Inés es que no tiene experiencia ni estudios en este puesto en particular. Su trabajo previo con Stanley estaba más vinculado al ámbito político, como la coordinación de distintas tareas con organizaciones sociales. Pese a eso el Gobierno la designó con carácter de “excepción”. En el ministerio trataron de minimizar la polémica asegurando que ella es “una persona de confianza”.
Esta no es la primera vez que le atribuyen a Máxima haber influido en la elección de un trabajo para su hermana en algún organismo público. Desde el círculo íntimo de las hermanas explican que el puesto que la más joven de las Zorreguieta tuvo como analista de investigación en la Oficina Regional en la sección de Servicios de Proyectos de las Naciones Unidas, en Panamá, habría sido elegido especialmente por la reina. Desde que se conoció la noticia, Inés bajó todavía más el perfil.
Máxima mantiene una amistad con el ministro de Hacienda y Finanzas Alfonso Prat Gay. Aun así, Holanda salió a despegarse del escándalo. Es que la prensa de aquel país la llamó “ñoqui real”. Nadie dijo que ser de la realeza fuera fácil. Pero tiene sus ventajas.
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