Noticias pudo dialogar con el ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, en la Feria de la Vendimia. Le preguntó por la realidad de un campo que prospera con la producción de ganado vacuno, soja, maíz y trigo y otro, el de las economías regionales, que siguen en problemas. “Por eso creamos el Fondagro (Fondo Fiduciario Nacional de Agroindustria). Nunca nadie destinó 1.800 millones de pesos a la sanidad. Abrimos el mercado de Brasil para la citricultura. Estamos volcando recursos, reconociendo que hay problemas en las economías regionales, pero quiero administrar la representatividad de los reclamos, que son muchos y con razón”, aclaró Buryaile.
Pero el Ministerio de Agroindustria es uno de los que más sufrirá ajuste en 2017, según el presupuesto. “El problema es de qué base partimos. ¿No será que estaba muy inflada o que estábamos desarrollando programas que no tenían visibilidad? O ajustamos o subimos impuestos. Nosotros intentamos racionalizar el gasto”, respondió Buryaile. ¿Bajó el presupuesto de agricultura familiar? “No, reestructuramos los programas uniformemente”, contestó.
¿El campo está bien? “El campo está mejor. Primero, por que se lo respeta al productor. Te sentís respetado, no maltratado”, confesó el también ganadero de Formosa. “No te olvides que había una resolución del Banco Nación que prohibía dar crédito a los productores. Más locura que eso yo no vi. El campo es escuchado, se le han aportado soluciones, no todas las que necesita, pero también hay otros sectores de la sociedad: jubilados, docentes… Escuchamos números positivos del campo porque hemos tomado medidas adecuadas. ¿Son suficientes? No. Tenemos que tomar más”, admitió.
¿Esas medidas influyeron en el encarecimiento del 80% del pan? “La incidencia del trigo en el pan es el 8%. Si el trigo sube el 100%, el pan debería subir 5%. Hay otros factores que inciden. Antes no teníamos suficiente producción ni calidad de trigo. La mesa de los argentinos se cuida produciendo más y no menos. Nos podemos equivocar, pero esa es nuestra línea”, aseveró Buryaile.
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