La vicepresidenta Gabriela Michetti le pidió que se acercara a su mesa para conversar. Ella aceptó. Habían pasado cuatro meses desde que el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, había conseguido convencer al presidente Mauricio Macri de despedirla de la jefatura de Aerolíneas Argentinas. No siempre sonriente, Isela Costantini era anoche en el hotel Hilton una de las figuras rutilantes de la cena anual del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC), think tank a cuyo consejo de administración se acaba de incorporar.
Costantini se puso a charlar con Michetti. Al rato, de entre los 1.300 invitados (un récord en las cenas de CIPPEC), se acercó otro renunciado del gobierno de Cambiemos: el ex ministro de Hacienda Alfonso Prat-Gay. Se sacaron fotos los tres juntos.
La jefa de la Oficina Anticorrupción, Laura Alonso, y la secretaria de Relaciones Parlamentarias, Paula Bertol, también saludaron con afecto a Costantini. Tanto Bertol como la ex CEO de General Motors (GM) Argentina suenan como eventuales reemplazantes de Martín Lousteau en la embajada en Washington. Costantini estuvo justamente la semana pasada en Estados Unidos y lo vio a Lousteau a propósito de las clases que ella fue a dar a la Universidad de Harvard y el Massachusetts Institute of Technology (MIT). Fue la misma semana en que en Buenos Aires en una cena de CEO’s de la consultora E&Y fue votada como la mejor entre sus pares de 2016, el año en que condujo Aerolíneas.
Uno de los vicejefes de Gabinete, Mario Quintana, saludó con un abrazo a Costantini en el Hilton y le propuso tomar un café. Quintana era quien en teoría llevaba la relación con ella, y no el otro vicejefe de Gabinete, Gustavo Lopetegui, ex CEO de Lan Argentina, que debe mantenerse al margen de la política de transporte aéreo si quiere evitar conflictos de intereses.
El CIPPEC fue fundado en 2000 por varios funcionarios del PRO: Miguel Braun, secretario de Comercio y autor de los Precios Transparentes, que anoche no dejaba de saludar invitados; Nicolás Ducoté, intendente de Pilar; y Fernando Straface, secretario general del gobierno porteño. El centro también fue creado por Sonia Cavallo, hija del exministro de Economía Domingo Cavallo. Pero el CIPPEC está integrado ahora por un equipo diverso. Entre sus directores figuran Julia Pomares a la cabeza, Gonzalo Diéguez en gestión pública, Gabriel Lanfranchi en ciudades, Martín Rapetti en desarrollo económico y Axel Rivas en educación, entre otros. En tiempos en que Macri apuesta a la polarización con el kirchnerismo, Pomares llamó a la dirigencia política a “negociar y conciliar”. En el consejo de administración, además de Costantini, están Jorge Mandelbaum como presidente, el exministro de Economía Roberto Lavagna, el expresidente del Banco Provincia del sciolismo Gustavo Marangoni y el empresario Guillermo Stanley (director del Banco Macro, Havanna y Fenoglio), por nombrar algunos. El excanciller kirchnerista y actual dirigente del Movimiento Evita Jorge Taiana y el radical Jesús Rodríguez son consejeros en uso de licencia. En su consejo asesor aparecen otros empresarios como Federico Braun (supermercados La Anónima), Alberto Grimoldi, Norberto Morita, Agustín Otero Monsegur, Karina Román y Woods Staton (Arcos Dorados, franquiciante de McDonald’s). También hay consejeros consultivos, como los empresarios Arturo Acevedo, Juan Pablo Bagó, el joven Eduardo Bastitta (Plaza Logística) y Gustavo Grobocopatel y los consultores Marcelo Elizondo y Carlos Fara. Estos últimos tres eran de los más consultados anoche por la actual cosecha de soja, las disputas comerciales que asomarán en el próximo encuentro de Macri con su par norteamericano, Donald Trump, y las futuras elecciones legislativas, cuya inscripción de candidatos cierra en solo dos meses.
Como en los últimos años, la cena de CIPPEC reunió anoche a la plana mayor del establishment económico y político, con la excepción de los ultra K. Asomaron esta vez varios kirchneristas que en tiempos del gobierno de Cristina Kirchner evitaban el convite, quizás para esquivar retos presidenciales. Estaban ayer el petrolero Alejandro Bulgheroni (Axion Energy), dueño de la segunda fortuna de la Argentina, y Luis Betnaza, uno de los máximos ejecutivos de Techint, cuyo dueño y máximo millonario argentino, Paolo Rocca, este año se ausentó. Se paseaba el abogado laboralista Daniel Funes de Rioja, que hoy perdió la batalla por asumir la presidencia de la Unión Industrial Argentina (UIA) frente al aceitero Miguel Acevedo pese a que contaba con el apoyo del Gobierno y de Techint. El amigo constructor de Macri Nicolás Caputo llevaba con orgullo su pin de Singapur en el saco -fue recientemente nombrado su cónsul honorario en Buenos Aires por esta ciudad estado con grandes inversiones inmobiliarias- mientras abrazaba y reía con el ex embajador norteamericano devenido lobbysta de intereses privados en el país Noah Mamet. Estaban el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti; el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo; el presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó; los gobernadores Gustavo Bordet (PJ, Entre Ríos); Miguel Lifschitz (socialista, Santa Fe), Gerardo Morales (UCR, Jujuy), Sergio Uñac (PJ, San Juan) y Alberto Weretilneck (Juntos Somos Río Negro) y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta (PRO). Entre otros referentes políticos participaron también Sergio Massa y Facundo Moyano (diputados del Frente Renovador), Juan Manuel Abal Medina (senador del Evita), Margarita Stolbizer (diputada del GEN), Victoria Donda (diputada de Libres del Sur), Nicolás Massot (diputado PRO), Ernesto Sanz (ex senador de la UCR), Daniel Arroyo (director del Banco Provincia por el Frente Renovador), Ricardo Delgado (subsecretario de Coordinación de Obra Pública Federal), Jorge Telerman (director del Complejo Teatral Buenos Aires), Daniel Filmus (exsenador K) y los intendentes peronistas Juan Zabaleta (Hurlingham), Gabriel Katopodis (San Martín), Mariano Cascallares (Almirante Brown), Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas) y Martín Insaurralde (Lomas de Zamora), con su esposa, Jésica Cirio. Muchos ministros dieron presente: Juan José Aranguren (Energía), Esteban Bullrich (Educación), Patricia Bullrich (Seguridad), Luis Caputo (Finanzas), Carolina Stanley (Desarrollo Social), Francisco Cabrera (Producción) y Dietrich. Eso sí: no hubo saludo entre el ministro de Transporte y Costantini.
Comentarios