****1/2 La segunda temporada de esta serie que lleva en el orillo el sello de David Fincher está a la altura de la primera: los detectives Ford, Tench y Carr siguen sumergidos en sus entrevistas a asesinos seriales para hacer lo que mandaría la ciencia pero no el sentido común: entenderlos para atraparlos. Mientras, niños negros mueren en Georgia y deben ocuparse del caso. La serie mantiene esa densidad de la primera, donde la experiencia profesional influye directamente en la vida de los personajes. Justamente ese es el auténtico tema: la lucha entre lo racional y lo irracional, entre la ciencia y la locura. Entre los episodios hay muchas escenas perfectas, pero quizás la que más va a molestar al espectador sea la entrevista con Charles Manson porque pone en duda la locura del personaje y la cordura del mundo. Ya se puede esperar ansiosamente una tercera temporada.
(EE.UU., 2019) Suspenso. Creada por Joe Penhall. Con Jonathan Groff. Netflix.
por Leonardo D’Espósito
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