Erich Remarque tenía apenas 18 años cuando fue reclutado por el ejército alemán para estar en el frente de batalla en la Primera Guerra Mundial. Los horrores y sus vivencias en las trincheras del primer conflicto global lo marcaron de por vida. Años más tarde, en 1929, escribiría la emblemática novela “Sin novedad en el frente”, considerada uno de los primeros best sellers antibélicos del siglo XX, que fue traducido en más de treinta idiomas.
La última adaptación de la literatura al cine del libro se estrenó esta semana en la plataforma Netflix. El film dirigido por Edward Berger es protagonizado por Felix Kammerer, Michael Witterborn y cuenta con la participación especial de Daniel Bruhl (“Bastardos sin gloria” y “Falcon y el soldado de invierno”). La cinta relata la vida en las trincheras de Paul Baumer, desde la camaradería inicial, cercana a la euforia, previa a la batalla, hasta el momento que vive su primer contacto con la muerte, el miedo y la desesperación.
No es la primera transposición de la novela pacifista a la pantalla. A lo largo de las décadas la obra de Erich Remarque tuvo dos adaptaciones anteriores, en diferentes formatos y en distintas épocas. En 1930, un año después de la publicación del libro, se estrenó la primera película basado en el relato del autor. Realizada por Lewis Milestone y estelarizado por Louis Wolheim, el éxito de taquilla le permitió a esta cinta obtener el Oscar a Mejor Pelicula y Mejor Director, en la tercera edición de los reconocidos premios.
Sin embargo, la segunda adaptación del best seller no fue en las salas de cine sino en la pantalla chica en 1979. El telefilme “Sin novedad en el frente” de Delbert Mann, protagonizada por Ernest Borgnine y Richard Thomas , se mantuvo muy fiel a la novela con excelentes críticas. La pelicula televisiva fue ganadora del premio Globo de Oro a Mejor Película para TV y recibió un Emmy a Mejor Edición en 1980.
Por otra parte, la vida del escritor Erich Remarque (seudónimo de Erich Remarke) por fuera de las vivencias bélicas, literarias y cinematográficas tampoco fue calma. El flamante éxito de su primera obra lo catapultò a la fama internacional, pero también a la persecución política. El consolidado partido Nazi lo posiciono como enemigo de la causa alemana, quemò sus libros, y se vio obligado a exiliarse, junto con su esposa, la actriz Ilse Zambona, a Suiza. En 1939, deciden huir del viejo continente y radicarse en Estados Unidos.
En tierras americanas, la vida personal del escritor alemán da un giro inesperado. La fama por algunos de sus libros llevados a las salas de cine como “Arco de triunfo” y “Tiempo de vivir, Tiempo de morir”, sin sobrepasar al éxito de su primera novela, lo coloco en un lugar privilegiado dentro del jet set.
Es en esa época, se divorcia de su esposa y empieza a tener notorios affaires con renombradas estrellas del cine de la edad de oro de Hollywood. Marlene Dietrich, Dolores del Río, Greta Garbo e Ingrid Bergman, según los tabloides, fueron las mujeres que estuvieron vinculadas sentimentalmente al artista .
La relación más perdurable la consiguió con la actriz francesa Paulette Godard. La exesposa del actor y cineasta Charles Chaplin, mantuvo el noviazgo con el escritor hasta 1958, año en el que se casaron. La relación continuo hasta el fallecimiento del novelista ocurrido en residencia de Locarno en 1970. El legado del escritor todavía perdura en el séptimo arte, en la literatura y en estos tiempos, tan complejos para la humanidad.
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