Wednesday 18 de September, 2024

ESPACIO NO EDITORIAL | 03-09-2024 10:34

Autoexigencia en rehabilitación. ¡Alguien tiene la culpa! Por Laura Vigliarolo

Laura Vigliarolo Coach Ontológico Profesional. Mentor Coach. Magister, nos invita a vivir de otra manera.

¿Te pasa que llegas cada día a casa tan cansada que no te quedan fuerzas más que para caer en la cama? ¿Te pasa que aún así sentís que podrías haber hecho un papel mejor  que el que hiciste?

¡Bienvenida al club!

Pero ¿Cómo empezó esta historia?

 Te enseñaron que tenías que dar “sudor y lágrimas” para conseguir las cosas que querías, porque parecía ser la única manera de merecerlas, como si el camino debiera ser sufrido. ¿Pero quién lo dijo?  ¿El Sistema? ¿Quién es el sistema?

¿Quizás unos padres que premiaban tus buenas notas en la escuela porque te hacían digna de su amor?

¿Aquella profesora que esperaba un rendimiento muy superior para incluirte en el admirable y selecto conjunto de alumnas inteligentes?

¿Ese mensaje subyacente? El empleado que se queda dos horas más es quien seguramente accederá al ascenso porque eso significa “mayor compromiso”.

Paso a paso fuiste construyendo la irrefutable idea de que cualquier mínima cosa con la que sueñes  será difícil de alcanzar, tendrás que luchar para obtenerla, te exigirá un sacrificio.

Pero sacrificio significa perder o entregar algo preciado. ¿Salud, tiempo, afectos? ¿Cuánto es necesario? Siempre más. ¿Cuándo es suficiente? Nunca lo es.

Así me pasó también.

Pero echar culpas hacia afuera sólo me deja en la posición de una pobre víctima.  No daré a nadie ese poder sobre mí.

Me gusta hacerme cargo de mi vida (sé que a vos también), decidir qué haré con lo que cada día me pone delante. Yo elijo ser mejor que ayer por la sana ambición de crecer, de superarme a mí misma. Pero según mis propias expectativas, no las que otros pongan sobre mí.

Es mi responsabilidad la construcción de mi ser y es necesario dejar la queja para abandonar este estilo de vida que llegó a agobiarme.

Te invito a observarte, sin juzgarte. Quizás aún no te diste cuenta (a mí me llevó décadas). Si descubrís que te estás exigiendo demasiado y que una sensación basal de insatisfacción te acompaña cada día, entonces  quédate cerca, atenta. Voy a enseñarte a reconocerte autoexigente, a aceptar ese aspecto en vos. Es necesario para poder iniciar una transformación sanadora, como la que yo he transitado.

 ¡Te aseguro que hay otra manera de vivir!

Si querés saber más contáctame en

Instagram: @lauvigliarolocoach

WhatsApp  +54 9 2215 31-7090

por CEDOC

Galería de imágenes

En esta Nota

Comentarios