Lázaro Báez sumó una nueva preocupación. Hasta ahora la Justicia se había metido con él, pero no tocaban a su familia: eso le daba cierta tranquilidad. Pero todo cambió este jueves 7 de febrero por la mañana, tras la declaración de su hijo mayor en Comodoro Py.
Los jueces le dictaron prisión preventiva a Martín Báez por mover más de 5 millones de dólares a pesar de estar inhibido, entorpeciendo la investigación de la ruta del dinero K. Ahora, habrá otro integrante del clan entre rejas. La furia de Lázaro podría ir en aumento.
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Según lo describió NOTICIAS, Martín es un hombre tímido, de pocas palabras y desconfiado. Por eso le costó tanto cuando su abogado le recomendó contratar a especialistas en comunicación, para intentar revertir el oscuro manto que cayó sobre su apellido. No hubo caso: el chico no logró soltarle rienda a los profesionales.
Con su padre en prisión y con la causa de la Ruta del Dinero K en marcha, quedaron atrás los viajes por el mundo, los millones gastados (y contados) y los autos de lujo. Según documentación a la que tuvo acceso NOTICIAS, en la década ganada, Martín Báez había realizado unos 40 viajes a diferentes países de latinoamérica, Europa y Asia.
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Desde que fue citado por la justicia, pudo imaginar lo que le esperaba. Bajó esta mañana en Aeroparque de campera deportiva, con una media sonrisa y un silencio absoluto: “¿Tenés miedo de quedar detenido?”, le preguntaron hasta el cansancio los periodistas al mayor de los hijos de Báez. No hubo respuestas. Se subió a una camioneta Audia A5 y se dirigió a Comodoro Py. Horas después se conocería la noticia de la prisión preventiva.
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