La crisis económica que atraviesa Argentina está afectando todos los sectores, desde emprendedores hasta empleados en grandes corporaciones. En momentos de incertidumbre, donde las oportunidades parecen escasas y la competencia es feroz, la marca personal se convierte en una herramienta clave no solo para sobrevivir, sino para sobresalir.
La pregunta que muchos se hacen es: ¿cómo podemos destacarnos cuando todo a nuestro alrededor parece tambalearse? La respuesta está en la capacidad de adaptación, la resiliencia y, sobre todo, en mirarnos a nosotros mismos, reconociendo las fortalezas que ya poseemos y ajustando nuestra estrategia a un contexto que cambia constantemente.
Estrategias para construir una marca personal sólida en tiempos difíciles. Algunas pistas para poder salir adelante:
1. Adaptación y agilidad. En este contexto, es fundamental ser ágiles. Aquellos que logran adaptarse a las circunstancias sin perder su esencia son quienes construyen marcas personales fuertes. Un ejemplo claro lo encontramos en muchos profesionales del marketing y la comunicación que, ante la reducción de presupuestos en las empresas, optaron por ofrecer servicios freelance o consultorías especializadas, diversificando así sus fuentes de ingreso. A través de plataformas como LinkedIn, no solo expandieron su red de contactos, sino que también se posicionaron como referentes en su área.
La clave está en la capacidad de ajustar rápidamente nuestra propuesta de valor. Si somos expertos en un campo específico, podemos buscar cómo aplicar ese conocimiento en otras áreas o industrias que estén en crecimiento. En Argentina, la industria tecnológica y los servicios digitales han mostrado mayor resistencia frente a la crisis. Reinventarse no significa cambiar quiénes somos, sino encontrar nuevas maneras de ofrecer lo que mejor sabemos hacer.
2. Resiliencia y autenticidad. La resiliencia es esencial para mantener una marca personal fuerte. Esto no se trata de resistir pasivamente, sino de aprender de los desafíos y seguir adelante. Un excelente ejemplo son los emprendedores gastronómicos que, ante la pandemia y la crisis económica, migraron a la venta digital y adoptaron un modelo de entrega a domicilio. La digitalización no solo les permitió mantener sus negocios en marcha, sino que también construyeron una comunidad online fiel y sólida, que fue clave para sostener su marca en medio de la tormenta.
3. La importancia de la presencia digital. En tiempos de crisis, la presencia digital se convierte en un refugio clave para expandir nuestra visibilidad. Según un estudio reciente de LinkedIn, el 40% de las contrataciones en el último año se realizaron a través de esta plataforma. Aprovechar herramientas como esta nos permite posicionarnos de manera estratégica en un mercado laboral que cada vez es más digital.
Construir una marca personal online requiere autenticidad y consistencia. No se trata solo de estar presentes, sino de comunicar con claridad nuestros valores, habilidades y aquello que nos hace únicos. Optimizar nuestros perfiles, publicar contenido relevante y participar en conversaciones dentro de nuestra industria nos ayudará a destacar. Pero atención: la autenticidad es crucial. En un mercado saturado, quienes son fieles a su esencia tienen mayor probabilidad de generar confianza y conexiones reales.
Un ejercicio de introspección. En medio de toda la volatilidad externa, es esencial no perder de vista lo más importante: nosotros mismos. La introspección es una de las herramientas más poderosas para construir una marca personal sólida. Mirarnos hacia adentro, conocer nuestras fortalezas, debilidades y valores, es lo que nos permitirá construir un horizonte propio, sin importar lo que suceda a nuestro alrededor.
Este proceso implica cuestionarnos: ¿qué nos hace únicos?, ¿qué valor podemos aportar?, ¿cómo queremos ser percibidos en el mercado? Al responder estas preguntas, nos daremos cuenta de que, aunque las circunstancias externas cambien, nuestra marca personal puede mantenerse sólida si está arraigada en lo que realmente somos.
La crisis económica en Argentina puede parecer desalentadora, pero también es una oportunidad para aquellos que sepan construir una marca personal fuerte, auténtica y adaptable. No se trata solo de esperar que el entorno mejore, sino de trabajar en nosotros mismos, en nuestra capacidad de adaptación y en cómo aprovechamos las herramientas digitales para destacar.
Más allá de las circunstancias, el verdadero diferencial está en la capacidad de mirarnos hacia adentro y proyectar hacia afuera lo mejor de nosotros mismos.
*Soledad Depresbitero es Lic en Relaciones Públicas, comunicadora y experta en Personal Branding
por Soledad Depresbítero
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