Los empresarios que crecieron de manera exponencial durante el kirchnerismo terminaron tras las rejas. Cristóbal López y Gerardo Ferreyra son dos exponentes de hombres de negocios que tras gozar de 12 años de influencia y negocios, desde el cambio de Gobierno no paran de recibir malas noticias. La causa conocida como Cuadernogate tiene entre sus detenidos al vicepresidente de Electroingeniería, quien está señalado como facilitador de bolsos con dinero que pasaba a retirar Roberto Baratta.
El empresario Cristóbal López, beneficiado con licencias de juego en la ciudad de Buenos Aires, el cual también se expandió tras financiarse con la retención indebida del impuesto a los combustibles que cobraba en sus estaciones de servicio de la cadena Oil Combustibles. Por esta causa está con prisión preventiva en Marcos Paz.
El otro empresario que de la nada se compró un diario y una radio fue Mariano Martínez Rojas, quien se quedó con el periódico Tiempo Argentino y Radio América en tiempo record, a cambio de pagar las deudas. Hoy es investigado por presunto lavado de dinero. Martínez Rojas cayó detenido luego de ser extraditado desde Estados Unidos tras haber violado leyes migratorias.
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