Es hermano de Clemente, cuñado de La Mulatona, primo del Hincha de Camerún. Es hijo de Caloi pero-y antes que eso- padre de sí mismo: Tute. Matías Loiseau (38) (ojos oscuros, pelo oscuro, oscuros también el humor, y la voz), es uno de esos extraños casos en los que el apellido juega tan a favor que termina jugando en contra.
Por eso, desde siempre, Matías mutó en Matute y finalmente en Tute, y desde hace veinte años se gana la vida haciendo humor. Una suerte de terapia ilustrada, de eterna sesión en voz alta que hoy se ha convertido también en un libro: “Tuterapia” (Ed. Sudamericana), poblado de divanes, de pesadillas, de obsesos y de ególatras tiernísimos. Tipos que conmueven porque nos espejan. Son nosotros, solo que en otro momento, en otro lugar. En otro cuadrito de la historieta de nuestras vidas. “El psicoanálisis es un tema que me apasiona, y de hecho hago análisis desde hace casi veinte años”, arranca, con una voz idéntica a la de su papá.
Noticias: ¡Carne de diván!
Tute: Bueno, pero en realidad yo empecé a hacer terapia, más que por algún problema a resolver, por pura curiosidad. Escuché toda mi vida a mi viejo hablando del psicoanálisis, a mi vieja que es psicóloga social, a la mujer de mi viejo que también tiene mucha terapia encima. Y yo veía que la lectura de todas las cosas se hacían a través de la psicología, de los dobles sentidos, de las pulsiones, qué sé yo. Todo tenía más de una lectura y siempre me llamó la atención eso. ¿Qué carajo es la terapia?, me preguntaba, y además ya me parecía curioso el hecho como tal, la técnica. Un tipito acostado, otro tipito sentado y de pronto se presupone que se van a resolver algunas cuestiones de tu vida. Eso me generaba mucha curiosidad y comencé más por eso que por cualquier otra cosa. Pero claro que después la vida te enfrenta con problemas que tenés que resolver y ese espacio te viene fenómeno para hacerlo.
NOTICIAS: Veinte años en terapia, entonces…
Tute: Sí, pero super interrumpidos porque capaz que llegaban las vacaciones y después me costaba volver. Me he pasado años sin hacer terapia y de hecho ahora no estoy haciendo. Me he dado las altas a mí mismo (risas). Después, me repatriaba solo.
NOTICIAS: ¿Y hablaba en la sesión? Se me ocurre que a alguien que dibuja quizá le cueste hablar.
Tute: No, no, lo entiendo bien a ese espacio como un lugar para resolver cosas. Y como “el” espacio para contarlas y para abrirse. Además, el psicoanálisis tiene características en común con muchas otras cosas que me interesan, como por ejemplo la poesía o el humor, que es lo que más desarrollo, y que tiene que ver con esta cualidad del lenguaje que dice y esconde al mismo tiempo. En terapia, todo lo que se dice pasa a ser metáfora, y en eso coincide con la poesía.
NOTICIAS: ¿Escribe poesía?
Tute: Sí, y también canciones. El año pasado saqué un disco de tangos con el cantor Hernán Lucero. Él como compositor y yo como letrista. Estuvo buenísimo. Se llamó “Tangos nuevos-Tute Lucero” y lo presentamos en distintos teatros.
Lea la entrevista completa en la edición impresa de la revista Noticias.
por Fernanda Sandez
Comentarios