Durante tres años, el actual jefe de Policía Bonaerense, Pablo Bressi, tuvo una relación sentimental paralela. Su esposa no lo sabía. Viviana Figueroa, que ahora tiene 48 años, conoció a Bressi trabajando en el 2000, él en su rol de policía y ella como abogada y prosecretaria de un Juzgado Federal de Morón. El 23 de febrero del 2001 empezaron a salir, cuando Bressi todavía estaba casado con Monastysky. “Por lo que sabía de boca de él, no llevaban vida de matrimonio”, afirmó Figueroa en diálogo con NOTICIAS. Tiempo después, y ya separado de la madre de sus hijos, la relación con Figueroa continuó como una pareja estable, con la que compartía momentos familiares y hasta la pasión por el buceo. Sin embargo, el accionar violento de Bressi resultó ser parejo: “En el 2009 me reventó los tímpanos con dos golpes delante de mi hijo y el suyo, y se fue a dormir”, cuenta Figueroa y remarca que así comenzaron los episodios de violencia que se acabaron cuando ella puso punto final a la relación, en el 2012. Para la funcionaria de la Justicia federal, esos últimos años fueron tiempos de “llorar y vivir llorando, y si él no estaba, no salir, porque si no era con él, no podía salir a ningún lado”.
Por lo que recuerda Figueroa, Bressi no habría aceptado del todo el fin de la relación. De hecho, “no lo hizo ni cuando le dije ‘no va más’ y me preguntó a qué hora nos juntábamos a almorzar al día siguiente”. Al día de hoy, la sombra de su ex pareja reaparece constantemente en la vida de Figueroa, que dice que no sabe “cómo hace, pero se entera de todo lo que hago, sabe dónde estoy, sabe dónde voy”.
Sin embargo, hubo tiempos mejores en los que funcionaron como toda una pareja.
Viviana Figueroa: Los dos nos dedicábamos a laburar y nos apoyábamos el uno al otro para llegar a fin de mes.
NOTICIAS: O sea que él no tenía una vida holgada.
Figueroa: Ninguno de los dos teníamos una vida holgada. Nos prestábamos 100 pesos para llegar a fin de mes de forma indistinta, el uno al otro. Yo lo ayudaba económicamente.
Éramos austeros. Un viaje lo programábamos durante meses. Para mí era un tipo honesto. Hoy no sé qué pensar.
NOTICIAS: ¿Qué opina de la denuncia de Elisa Carrió?
Figueroa: Si me preguntás del Pablo Bressi que yo conocí, no puede ser, porque yo jamás hubiera estado con una persona así. Si me preguntás por el hombre que no conozco, es fácil saberlo.
NOTICIAS: ¿Creció su patrimonio?
Figueroa: Por lo que yo ví, y sin darte mayores precisiones, sí: se le nota que tiene una capacidad económica…
NOTICIAS: ¿A qué atribuye ese crecimiento patrimonial?
Figueroa: Cualquiera que conozca cómo era su casa y la vea hoy se da cuenta de que hace falta un billete para hacer lo que hizo. No sé de dónde sale. Me hace ruido la denuncia de Carrió y si es cierto, yo estuve con otra persona, no con esta.
NOTICIAS: Pero también estamos hablando de un hombre al que definió como dulce y terminó golpeándolo…
Figueroa: Sí, el mismo. Y sin importarle nada, porque me golpeó delante de mi hijo, que tenía 13, 14 años.
NOTICIAS: ¿Se recauda ilegalmente en la Bonaerense?
Figueroa: Saber no sé. Sólo puedo usar la lógica: no creo que un subalterno recaude para sí, no creo que un jefe recaude sólo para sí. Y si tuviera que pensar en una cadena de mando, tampoco creo que termine en él.
NOTICIAS: Al ver los números de drogas en el Sur, o el crecimiento de los secuestros en el Oeste, es imposible no recordar que son lugares en los que Bressi estuvo mucho tiempo.
Figueroa: Pero así como me costó reconocer que es un golpeador, me cuesta creer que él tenga que ver con esto. Por lo que yo puedo ver, tampoco sé si su crecimiento patrimonial lo traía de antes y lo empezó a mostrar después de nuestra separación.
NOTICIAS: ¿Cómo es su vida hoy?
Figueroa: La última vez que recibí a un amigo, cuando salí de casa fue golpeado y advertido de que no vuelva a verme por gente enviada por Pablo. Entonces, en este momento, no recibo a ningún amigo. El mensaje que le dieron a mi amigo venía en su nombre… Que no me viera más.
NOTICIAS: ¿Está tranquila en tu casa?
Figueroa: No estoy tranquila en ningún lugar. Veo el mismo auto que está en el mismo lugar por el que yo paso siempre con gente adentro. Por distintos lugares me llegan mensajes de que si yo hablo, estoy muerta. Además, un día de semana a la noche, apareció abierta la puerta de mi casa. Yo estaba dentro, durmiendo. Tengo perros y ninguno se alteró. Una vecina avisó a la Policía y tomaron las medidas de rigor para asegurarse si yo estaba bien. Se retiraron recomendándome que la próxima vez cierre bien la puerta.
NOTICIAS: Tus perros no son de reaccionar.
Figueroa: Tengo cuatro rottweilers. Ante un desconocido reaccionan. Hoy, dos de ellos están con atención veterinaria porque fueron intoxicados.
NOTICIAS: ¿A qué le tenés miedo hoy?
Figueroa: A que realmente todo esto venga de la mano de Pablo y lastimen a mi hijo. Que me hagan algo a mí, no me importa. Mi hijo me importa.
NOTICIAS: ¿Qué creés que pueda resultar de la investigación y que querés que resulte de la investigación?
Figueroa: Creo que no va a resultar nada. Porque los entramados políticos van a hacer que quede en la nada. Y, de verdad, quisiera que fuera todo mentira.
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