Se esperaba una derrota. Pero también una diferencia menor. Si Alberto Fernández le ganaba a Mauricio Macri por 6 puntos o menos, los globos invadirían el bunker de Costa Salguero. Pero eso no pasó y se vio venir desde las 19.30, cuando el equipo encargado de la seguridad recibió la orden de guardar todos los globos.
Al final de la noche y ya con el bunker desarmado, los globos quedaron tirados a un costado del escenario, detrás de una cortina negra. Sucede que los globos se convirtieron en un objeto que simboliza el éxito en cualquier campaña del macrismo, pero esta vez la señal llegó temprano.
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Se mantuvo el suspenso hasta último momento, pero la verdad al final los datos salieron a la luz y la fórmula Macri-Pichetto recibió un duro golpe de parte del duo Fernández-Kirchner. Hasta los globos lo sintieron.
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por R. N.
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