Fritas o al horno y con todo tipo de relleno, la empanada es la comida criolla con más vigencia actual en la vida cotidiana. En reuniones de amigos, cumpleaños, catering empresariales o de paso, es el alimento que más acompaña al argentino en sus distintas versiones, según la zona o provincia que uno se encuentre.
“Por más de que haya quienes la consideren una comida menor, la empanada es absolutamente querida y despierta pasiones, porque es hogar por antonomasia y a la vez define las gastronomías regionales, porque cada provincia tiene la suya”, declaro Pietro Sorba a Revista Noticias. El especialista y responsable del libro "Santa Empanada" distingue más de cuarenta variedades de empanadas que tiene su impronta según la región del país.
Si bien la existencia de la empanada está familiarizado con la idiosincrasia local, su origen data de la península ibérica, siglos antes de la llegada de Cristóbal Colón al nuevo mundo, y en principio se expandió por el mediterráneo. “Su formato seductor se metió en el bolsillo a la mayoría de los pueblos del planeta. Es una idea hija de la necesidad de solucionar varios problemas a la vez: ensamblar, conservar, transportar, vender, fraccionar, presentar y, por supuesto, comer de manera práctica y sin cubiertos”, explica el escritor.
En la actualidad, eventos como el Campeonato Federal de la Empanada en Mataderos, o los emprendimientos de empanadas argentinas en el exterior, son tan solo algunos ejemplos del crecimiento masivo de la comida y la jerarquización del plato como embajadora culinaria. Para el consumo urbano se distingue cinco lugares gastronómicos recomendados por su originalidad en la elaboración y creatividad en el gusto.
MAIKY (Gorriti 5806)
Especializada en carnes ahumadas, esta parrilla se destaca por el tratamiento de la carne y las brasas. Marinados con olivo o nogal, el relleno de las empanadas obtiene su sabor en la textura como en el aroma. Tanto los ingredientes cocidos, como los aderezos y la masa artesanal, confluyen en un manjar de los más solicitados. El cordero ahumado con astillas de olivo es el favorito de la concurrencia.
MI GUSTO (Av. Cnel. Niceto Vega 5795)
Gratinadas con queso parmesano, tanto en su versión frita o al horno, la propuesta de Mi Gusto se encuentra en la variedad de sabores. Más allá de los gustos convencionales o de consumo masivo, que el local posee en su menú, la experiencia identificatoria se encuentra en el relleno experimental. Cheeseburger, American Chicken, provolone con jamón, salchicha con cheddar y vació con provoleta, son algunas opciones para el deleite del cliente.
BANCO ROJO (Bolívar 866)
La sofisticación en la elección de los gustos impera en la carta de Banco Rojo. El reducto de San Telmo ofrece en exclusividad empanadas fritas. Sin embargo, la distinción gourmet se encuentra en la originalidad de los sabores. Morcilla, calabaza asada y queso, vegana con garbanzos, coco y curry, son opciones ricas y creativas para el visitante.
BUENOS AIRES VERDE (Vidal 2226)
La alternativa orgánica y vegetariana, con un diseño de autor y elaborada con productos de estación. Aplicando técnicas tradicionales, busca ofrecer una opción vegetariana rica y sana. Sobresalen las empanadas de carne, hechas a base de gluten, harina integral y pan rallado.
El HORNERO DE SAN TELMO (Carlos Calvo 455)
Con la impronta de la comida tradicional argentina, las variedades de empanadas de El Hornero se destaca en los gustos más arraigados de la cultura criolla. Carne cortada a cuchillo, las de estilo salteño, de mondongo o de vegetales se imponen en el listado de variedades por su materia prima y fidelidad al folklore gastronómico.
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