**** Hay pocos nombres que trasciendan el campo del porno. Uno de ellos es el de Rocco Siffredi, el más grande de los pornostars italianos (y del mundo, digamos todo), no solo famoso por dotes sino por la intensidad que imprime a sus personajes. Siffredi es un ícono en más de un sentido y este documental lo muestra completo. Lo escuchamos hablar, incluso confesar cosas terribles de su vida; habla de la obsesión absoluta por el sexo, de sus varios retiros, de la ambigüedad que su naturaleza despierta en su mente. Y además lo vemos filmar, tratar a sus partenaires y, sobre todo, preparar la última película y la última escena que protagonizó. Es a la vez una película erótica y un retrato casi descarnado. Y nos introduce en ese mundo que miramos con fascinación y miedo, el de la pornografía, sus triunfos y sus miserias, de cómo ese constante ejercicio desnudo interviene en la vida cotidiana.
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