Laurel Interiorismo: acción, movimiento y libertad

Sofía vivió muchos años en un pueblo llamado La Colina; al sudoeste de la provincia de Bs As, alrededor de mucho campo. Un lugar donde la carrera de Diseño aún era muy nueva. Siempre le costó conseguir que algo le guste, de chica perseguía la idea de tener cosas únicas, distintas y personalizadas.

Por eso fue que descubrió su pasión por el diseño. Instagram la ayudó a dar sus primeros pasos en el Interiorismo. Le brindó la seguridad que necesitaba para poder hoy lanzarse de lleno como Diseñadora de Interiores.

“El diseño es una profesión que me regala una cierta libertad, que me permite volar a ese mundo de ideas al que recurría siempre de niña y hacer realidad lo que antes parecían sueños o ideas muy lejanas” refiere la creadora.

Las imágenes que comparte en su red son un poco eso, el reflejo de lo que siempre persiguió y de lo que quisiera plasmar en sus diseños. Lugares con alma, esos que te atrapan y no podés dejar de ver. “Para mi Laurel es la libertad que busqué siempre” refiere Sofía.

Fuhr se inspira en la naturaleza, en su pueblo, en la ciudad, en las imágenes y en el silencio. Es curiosa y gran observadora de lugares. “Es fundamental conectarse con el cliente, lograr entender su historia, su familia, saber qué los emociona y poder plasmarlo en el ambiente ya que un hogar tiene que ser el reflejo de quien lo habita” menciona la diseñadora.

Le gusta trabajar con colores neutros y claros, como el blanco, los grises y los colores tierra. Colores versátiles que ayudan a incorporar gran luminosidad a un ambiente generando mucha calidez.

“No me defino dentro de un estilo determinado, pero me gusta la idea de generar espacios atemporales, cálidos, que inviten a pasar largas horas en ellos y que a la vez estén llenos de vida” indica.

Siempre se encontró en la búsqueda de lo original, lo distinto y lo sofisticado; algo que se destaque del resto y lo haga único. “Considero que a la hora de diseñar no debemos tener miedo a sobrepasar ciertos límites, romper varias reglas y dejar de lado lo establecido” cuenta la joven.

Sofía sueña con que este proyecto llegue a muchas personas, que se puedan sentir identificadas con la esencia de los diseños y por supuesto que con el tiempo esos interiores no sean sólo una foto de Internet, sino espacios creados por ella.

“Ansío poder tener mi propio estudio de diseño, realizar proyectos que rompan ciertos paradigmas, superar desafíos y trabajar en conjunto con otros profesionales. Apunto a contagiar a los demás las ganas de innovar o renovar espacios, a enseñarles a mirar a través de mis ojos y así poder salir de los estereotipos, inundando de belleza los ambientes”.