Friday 5 de December, 2025

ESPACIO NO EDITORIAL | 22-10-2025 05:40

Cuando hacer más no es avanzar

Vivimos entre exigencias y pendientes, corriendo detrás de ideales que nos alejan de nuestra esencia. A veces, detenerse y bajar el ruido es la verdadera forma de seguir creciendo.

Hay momentos en que la vida empieza a hacer ruido; un murmullo constante de exigencias, comparaciones, pendientes y expectativas. Durante mucho tiempo viví así: corriendo detrás de todo, tratando de sostener un ritmo que no me daba respiro. Me llenaba de obligaciones y hobbies con el objetivo inconsciente de ser productiva, no me permitía no ser “funcional” Hasta que un día, sin planearlo y prácticamente obligada por la vida, empecé a bajar el volumen.

Apagar el ruido externo fue reconectarme con mi voz. Me di cuenta de cuán lejos estaba  de mí misma tratando de cumplir con todo y con todos. En ese silencio, incómodo al principio, empecé a reconocer lo que realmente necesitaba: calma, claridad y conexión conmigo.

Y ahí fue cuando comenzó a aparecer nuevamente la  creatividad, esa chispa que se apaga cuando la cabeza está llena de ruido. De a poco, pude ver hacia dónde quiero ir. Entendí que no se trata  de hacer más, sino de hacer con sentido.

En ese silencio también aparecieron emociones que me incomodaban: la nostalgia, la angustia, el vacío, mi propia voz a través de los recuerdos. Durante mucho tiempo rechacé todo eso, porque creía que venían a lastimarme. Pero esta vez me enfrenté a esos sentimientos.  Entendí que esa nostalgia no venía a castigarme, sino a recordarme que me elija, que me elija siempre, por todas las veces que no pude hacerlo antes. Y pude mirar con ternura a la Laura que fui, la que buscaba aprobación, la que hacía lo que podía con las herramientas que tenía. Esa era yo, y también merezco abrazarla.

También empecé a aceptar mi realidad actual sin juzgarla.  Me di cuenta de que muchas veces esa autoexigencia también se disfrazaba de ambición. Que al no aceptar del todo en qué punto estoy, terminaba compitiendo conmigo misma, buscando ser la versión que “debería ser” en lugar de abrazar la que soy hoy. A veces tomé decisiones desde ese lugar: como cuando quise crecer más rápido, invertir en cosas que no eran prioridad o hacer movimientos que, en el fondo, nacían del miedo a quedarme atrás. Hoy entiendo que no eran errores, sino intentos de sentirme suficiente.

Delegar sigue siendo una decisión importante, pero reconozco ahora que hay cosas que necesito sostener yo, y este movimiento no viene de la carencia sino del deseo de abrazar mi presente como profesional, aprender y empezar el camino de expandirme desde otro lugar.

Apagar el ruido me ayudó a ver que no estoy empezando de cero, lo estoy haciendo desde todo lo que ya aprendí, que no necesito demostrar nada, solo seguir avanzando con verdad, con coherencia y con confianza en mi proceso.

Conocerte en profundidad es el paso certero hacia tu autenticidad, entiendo que a veces puede ser un proceso largo, duro y quizás doloroso, pero te aseguro que es mucho más caro el precio de no ser vos mismo. El camino a seguir y todas las respuestas están en vos: elejite siempre y confiá en lo que te dicta tu propia voz.   

 

Celular: +54 9 11 4439 2227

www.contadoralauragomez.com

Fotos: @arielfoto2024

Marketing digital: @caromamadigital

 

por CONTENT LIKE

Galería de imágenes

En esta Nota

Comentarios