Es obligatorio por ley que todo automovilista cuente con una cobertura de responsabilidad civil, conocida como "seguro contra terceros", que cubra daños físicos y materiales a otros en un siniestro vial.
Si el causante del choque no tiene seguro, se expone a ser multado y, lo más grave, a afrontar los costos del accidente con su propio patrimonio. También puede ocurrir que el conductor tuviera seguro, pero lo haya suspendido por no pagar la cuota a tiempo.
En estos casos, conseguir una indemnización puede ser más complicado. Sin embargo, el procedimiento a seguir depende de varios factores clave:
- ¿Quién tuvo la culpa?
Esto se define según la mecánica del accidente, considerando factores como la velocidad, el estado del conductor y la prioridad de paso. Si la culpa fue del otro conductor, se podrá hacer el reclamo a su aseguradora o directamente contra él si no tiene seguro. - ¿Cuánto se dañó mi auto?
Si el choque causó daños parciales o si el costo de la reparación supera el 80% del valor del vehículo (según la póliza), el auto se considera "destruido" y se procederá a la indemnización. Dependiendo del tipo de cobertura, esto será manejado por la aseguradora correspondiente. - ¿Qué tipo de seguro tengo?
Si tengo cobertura "todo riesgo", mi aseguradora cubrirá los daños, incluso si el otro conductor no tiene seguro. Si tengo solo cobertura de "terceros", la situación cambia. Este tipo de seguro no cubre los daños a mi vehículo, por lo que tendré que reclamar directamente al responsable del accidente.
¿Qué hacer si el conductor no tiene seguro?
Si el conductor no tiene seguro o su póliza no está al día, el reclamo debe dirigirse al titular del vehículo o al conductor. En caso de fuga, es clave obtener la patente del vehículo para solicitar un informe de dominio y conocer quién es el dueño.
En todos los casos, esta situación lamentablemente hace que las cosas no resulten sencillas.
Autor
Franco Piazze
Abogado
T° 131 F° 976 CPACF
1163690761
1177001957 int 2001
Tuveunchoque.com.ar
por CEDOC
Comentarios