"My baby" y una carita de enojo con lágrimas fue lo único que le nació al excéntrico heredero de los multimillonarios Pérez Companc, Pablo, para acompañar las fotos de su yate antes y después del incendio en el que, este jueves 21 de mayo por la mañana, la embarcación quedó completamente destruida.
En total, seis barcos fueron dañados después de que estallara un incendio en el puerto deportivo de Rickenbacker, en Miami, ciudad donde el millonario está instalado desde hace años junto a su pareja, la periodista Evangelina Ortiz.
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Pablo es conocido por sus extravagantes y costosos gustos. Su fanatismo por las pistas lo convirtió en un coleccionista de autos deportivos de altísima gama y cuyos valores son casi incalculables. Esto no solo le trajo problemas con su familia sino que además le causó un accidente en el que casi pierde la vida y que lo tuvo postrado durante mucho tiempo. Tras recuperarse, volvió a corre en auto y decidió gastar todo en darse gustos. Sin ir más lejos, en la lancha que se incendió había invertido mucho tiempo y dinero hasta que logró dejarla como él quería.
por R.N.
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