Se cumplen 10 años de la asunción de Francisco como Papa, el primer Papa latinoamericano, con una visión distinta para la Iglesia, para el mundo y, fundamentalmente, un compromiso con los pobres, con los más necesitados. Y esto es lo que marca toda la pastoral del Papa Francisco.
Como Bergoglio, en Argentina, en sus funciones como cardenal iba a ayudar a las villas, a trabajar y compartir con los pobres sus esperanzas y sus necesidades.
Ahora, el Papa Francisco trata de renovar, de darle un nuevo rostro a la Iglesia. El compromiso junto con los pobres, me recuerda a lo que fue el Concilio Vaticano II y el Pacto de las Catacumbas convocado por Helder Cámara, donde muchos obispos se comprometieron con los pobres de no tener riquezas y de compartir la vida como nos enseña el Evangelio. El Papa Francisco da un testimonio, permanentemente, por la paz.
Cuando asumió hubo muchos malos entendidos. Por suerte, trataron de que la gente comprenda quién es el Papa Francisco y lo que hace en su ministerio pastoral. Es fundamentalmente un Pastor que camina junto al pueblo de Dios y que va a otros países con una visión ecuménica amplia, pero siempre desde las raíces del Evangelio. A 10 años, está demostrando que es la gracia del Espíritu quien lo guía.
Lo acompaño, oro por él todos los días y pienso que es un hombre que está dando más esperanza en una situación de un mundo conflictivo, con guerras. La voz del Papa es una voz escuchada en el mundo. Y esperemos que su misión pastoral dé sus frutos. Los está dando. Para llamar al mundo sobre la necesidad de vivir fraternalmente de acuerdo al mensaje del Evangelio.
*Premio Nobel de la Paz.
por Adolfo Pérez Esquivel*
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