Ingeniero agrónomo y enólogo, nacido en General Alvear, al sur de la provincia de Mendoza, tiene una familia con esposa, tres hijos y una pasión: la viña. ¿Qué es ser enólogo, qué es la enología? ¿Ser enólogo en la Argentina es igual que serlo en el resto del mundo? “Brevemente, enólogo es el profesional que se encarga desde la elaboración, crianza, estabilización, definición del estilo del vino a través del blending hasta su embotellado y su comunicación en el mercado. Hay tanto ingenieros agrónomos como licenciados en enología, comprometidos en esta actividad tan apasionante”, dice Belmonte desde su provincia natal, mientras conversamos para esta nota.
Noticias: ¿Qué es la viticultura? Hasta no hace mucho era vitivinicultura. ¿Significan lo mismo? ¿La segunda versión está equivocada?
Marcelo Belmonte: Son distintos conceptos. Cuando hablamos de vitivinicultura, hablamos de toda la cadena de valor de la industria, que va desde la producción vitícola, la del vino, su embotellado, la logística para la llegada a los mercados y toda la comercialización, tanto en mercado doméstico como exportación. Si decimos viticultura, nos referimos al inicio de esta cadena de valor, de todo lo referente a la producción de las uvas de vinificar. Abarca la elección del sitio a cultivarse en función del estilo del vino y el segmento de precio que queremos alcanzar. El sitio define fuertemente el clima en el cual ese viñedo va a crecer y producir. En mi experiencia, es el factor fundamental que determina la calidad potencial que un vino producido puede llegar a alcanzar. Luego prosigue el suelo que, dentro de esa calidad potencial sustentada por el clima, demarcará estilos, variantes o personalidades únicas. Implica -dentro de esas condiciones climáticas- realizar el mejor diseño de las parcelas, según la variación de suelos, el tipo de poda, definiciones de orientación de hileras, variedades mejor adaptadas, clones y portainjertos, el mejor sistema de conducción. Una vez implantados los viñedos, el viticultor se encarga también de su manejo, programación, estrategia y monitoreo del riego. También el mantenimiento de sus condiciones sanitarias, la operación del manejo de su vegetación, la cosecha misma y el envío de esas uvas a bodega.
Noticias: Es ingeniero agrónomo graduado en la Universidad Nacional de Cuyo. ¿Cuándo despertó su interés por el vino?
Belmonte: Siempre me atrajo el trabajo del campo, tanto la fruticultura como la viticultura, desde chico. Mi abuelo paterno, inmigrante español, se dedicaba a la producción de frutas y vino en una pequeña bodega en General Alvear. Luego mi padre, médico de profesión, me inculcó la pasión por la ciencia y a entender el complejo y apasionante mundo de la biología. Nunca dudé en estudiar ingeniería agronómica.
Noticias: Realizó una Maestría en Viticultura y Enología en la Universidad de California, en Davis. Ha dicho que allí tuvo profesores que marcaron su forma de interpretar la viticultura y la enología. ¿Puede explicar en qué sentido?
Belmonte: Gracias a una beca Fulbright-YPF pude estudiar en la UC Davis, en USA. Tuve grandes profesores como Roger Boulton, Dr. Larry Williams, Dr. Andy Walker, Dr. Wolper, Ann Noble y tantos más. Cada uno me dejó algo y marcó mi forma de entender la viticultura y la enología. Pero sin duda, el Dr. Nick Dokoozlian fue uno de mis grandes mentores. Me permitió entender cómo interactuaban decisiones y prácticas del viñedo en la fisiología de la planta y su impacto en la calidad del vino.
Noticias: ¿Cuánto tiempo hace que integra el Grupo Peñaflor y cuál es su posición en la compañía?
Belmonte: Una vez que regresé de USA, ingresé a Grupo Peñaflor hace algo más de 20 años. Actualmente me desempeño como Director de Viticultura y Enología de todo el grupo, junto con un gran equipo de profesionales de todos los rubros. Ingenieros Industriales, Agrónomos, en Recursos Naturales y en Alimentos; licenciados en Enología y en Bromatología. Lo que busco es tener una visión diversa y rica en experiencias y conocimientos, para desarrollar cada vez más pensamiento crítico en cada tema que abordamos.
Noticias: Alguno de esos temas…
Belmonte: Mi área se encarga de todo lo referido al manejo de 3500 Ha distribuidas en casi todas las regiones vitivinícolas de la Argentina. Valles Calchaquíes, Mendoza, San Juan, Neuquén y Buenos Aires. También de acompañar a toda nuestra comunidad de productores, que son algo más de 700. Siguiendo la cadena de valor, como Grupo Técnico Enológico, establecemos procesos de elaboración, crianza, estabilización y embotellados del vino y realizamos auditorías para medir la adherencia de los procesos en cada una de nuestras bodegas. Por último, llegamos al proceso de blending definiendo los perfiles y estilos de nuestros vinos. Cada bodega de nuestro grupo tiene su propia impronta en cuanto a estilos.
Noticias: ¿Cuál es el mayor desafío con el que se encuentra a diario?
Belmonte: Trabajar en todas las regiones de Argentina. Es sorprendente advertir las capacidades que se generan en el equipo al tener que hacer vinos en distintas regiones. Hay aprendizajes cruzados que son sumamente valiosos. Por otro lado, el foco permanente de todas nuestras bodegas es cómo podemos entregar más valor a nuestros consumidores. Todas las áreas trabajan en esa misma dirección.
Noticias: Tienen muchas marcas y muchos viñedos. Cada zona vitícola tendrá su terroir y su procedimiento. ¿Hay similitudes entre un Malbec del noroeste, un salteño y otro que ofrece la región fría y marítima de Chapadmalal?
Belmonte: Cada zona por su clima, suelos y estilo de vinificación, entrega algo distinto. Los Valles Calchaquíes son valles cerrados, acompañados al este por las sierras del Aconquija y al oeste por las de Quilmes. Sus cumbres generan un nuevo horizonte que modifica el momento de ocurrencia del amanecer y el atardecer. El patrón de luz es totalmente distinto a otro valle. Por otro lado, la altitud define una mayor intensidad de luz y modifica las temperaturas, esto imprime aromas y colores diferentes. Los Valles Calchaquíes dan vinos muy distintivos al resto de Argentina, de gran complejidad aromática, que tienden hacia los especiados y frutas rojas, taninos amables, colores intensos y profundos. El valle es muy diverso. En cambio, en Chapadmalal a sólo 5 km de la Costa Atlántica, las condiciones son muy diferentes: el clima es frío y ventoso. Sus suelos son más bien arcillosos y su paisaje es de colinas suaves. Son viñedos de secano, no son irrigados, dado las precipitaciones de la zona. Es una viticultura única, donde el clima frío y ventoso define vinos frescos, de una acidez jugosa, de menor graduación alcohólica y aromas delicados. Es un proyecto al que le tengo un cariño especial. Fue desarrollar una nueva zona vitivinícola.
Noticias: Tienen un grupo de enólogos jóvenes. Son siete y se llaman Liga de enólogos. Crearon su primera línea comercial, El Bautismo y buscan acercar el vino al público millennial. ¿De qué forma?
Belmonte: Exacto, es un proyecto que busca innovar, sin limitaciones y eliminar lo complejo en el consumo del vino. Acercar las nuevas generaciones a una bebida milenaria puede ser algo divertido, pero también de exploración. Pero no transformar el consumo del vino en algo demasiado sofisticado.
Noticias: ¿Qué proyectos tiene Grupo Peñaflor para los próximos años?
Belmonte: Muchos; nuestra visión es poder estar dentro de las 5 bodegas más grandes del mundo. Esto nos lleva a levantar nuestros estándares cada vez más.
Noticias: ¿Cómo ve a nuestro país? ¿Somos capaces de hacer vinos de calidad y de crecer a nivel mundial?
Belmonte: Argentina tiene todas las condiciones para seguir creciendo a nivel mundial. Tenemos vinos de alta calidad, pero todavía solo somos el 2.5% del comercio mundial referidos a exportaciones. Hay margen para crecer, pero debemos ser más competitivos. El nuestro es el país vitivinícola que más aranceles paga en el mundo. Estos son los temas pendientes a trabajar.
Noticias: ¿El nuevo gobierno cambió el escenario de las exportaciones o no se ha movido demasiado la aguja?
Belmonte: En realidad, el contexto mundial es complejo, hay una caída de consumo que genera excedentes de vino. Esto es en general; después cada segmento de precio tiene un comportamiento distinto ya que el mercado tiende a “premiunizarse”. El contexto económico mundial no ha ayudado a recuperar el consumo. Otra realidad es que hay un estancamiento en el consumo de vinos importados en el mundo, que ronda el 45% del consumo y esto puede deberse a un panorama económico mundial desafiante. De todas formas, somos positivos. El vino como bebida milenaria ha atravesado desafíos a lo largo de su historia. Es una industria cíclica.
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