Patricia Bullrich, precandidata a presidente por Juntos por el Cambio, sufrió muchos inconvenientes a la hora de realizar su voto electrónico para la elección del candidato a Jefe de Gobierno por la Ciudad de Buenos Aires. Dijo que tuvo que intentar 7 veces y tardó casi 13 minutos en poder votar.
Durante toda la mañana hubo demoras y largas colas en las escuelas porteñas por la implementación del voto electrónico, e incluso una advertencia de la jueza electoral María Romilda Servini de Cubría que habló de “impericias”.
La candidata presidencial llegó pasadas las 12 al predio de La Rural, en el barrio porteño de Palermo y tras su voto en papel se dirigió a la máquina electrónica donde iniciaron los problemas. Cuatro intentos, dos técnicos que la asistieron, un cambio de máquina y boletas que no se lograban imprimir, para un total de 13 minutos 45 segundos, que sumados a los 3 minutos utilizados para la votación tradicional a Candidato a Presidente, le llevó casi 17 minutos su paso por el cuarto oscuro, que comenzó con sonrisas y una bolsa de facturas y terminó con una improvisada y desordenada conferencia de prensa donde la ex ministro de seguridad de la Nación, mostró su malestar.
“Estoy contenta de haber venido a votar y con mucha ilusión por el cambio, pero la votación del Gobierno de la Ciudad fue un desastre. Voté 7 veces y vinieron dos técnicos. Votaba una lista en la máquina y salía otra lista, no la que quería votar. Tampoco entendí mucho la máquina. Tuve que esperar a que me explicaran. Los técnicos vieron mis votos, cambiaron la máquina. Tuvieron que inaugurar otra máquina. Los sistemas electorales tienen que tener un nivel de maduración, hay que probarlos antes, hay que trabajarlos durante un tiempo largo como para ver si efectivamente funcionan”. Y ante la insistencia de los periodistas por la gravedad del hecho, Bullrich concluyó: “Dos veces entró la boleta que puse en la máquina y siguió de largo sin imprimir nada. Es grave que suceda eso”.
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