"Veo que a Juntos por El Cambio no le está saliendo una. Hay individualidades que andan bien pero el conjunto no está funcionando", apuntó el intendente de Pinamar, Martin Yeza, quien en diciembre dejará el cargo tras dos mandatos, una decisión que espera genere ecos en JXC, donde la puja por espacios de poder quedó expuesta.
"En mi caso es una decisión ética, el no volver a presentarme. Las ciudades y los proyectos tienen que sobrevivir a las políticos", sostuvo Yeza, quien destaca también el caso de Rodrigo de Loredo en Córdoba, quien declinó su candidatura a gobernador en favor de Luis Juez, y ahora irá por la intendencia de la capital.
"Los cambios que hacen faltan en la Argentina los pueden llevar adelante quienes están en Juntos por el Cambio. Hay que ver si el orden de los factores altera el producto", agregó el intendente en función de la interna entre Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich, los dos grandes contendientes que tiene el PRO.
Un versus que desgasta la imagen de la coalición frente a un electorado que tiene problemas concretos desatendidos, donde inflación e inseguridad figuran al tope de la lista. "Tenemos un proceso de degradación social. El que tenía poco no tiene nada y el que tenía un poco más está a nada de perderlo todo", apuntó Yeza.
"La situación en la provincia es muy delicada. Durante la crisis del 2001 no había nadie en la calle y la semana pasada cuando el dólar pasó los $500 tuve esta misma sensación de parálisis", reconoce el intendente sobre la inacción de la política frente esa agenda. "Es lógico que aparezcan discursos que eclosionen el sistema", sumó sobre el crecimiento de Javier Milei, quien capitaliza los enojos del electorado.
Y destaca la necesidad de un cambio de paradigma. "Tus hijos ven que no llegas a fin de mes y es muy difícil decirle que el camino del esfuerzo es el correcto y por el otro lado tienen el estímulo del camino fácil, del narcotráfico y los planes", concluyó.
por R.N.
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