En un mundo globalizado y con mercados fragmentados, cada vez son menos los escritores que generan intriga por sus próximos libros. El escritor francés Michel Houellebecq es una de esas raras excepciones que remiten más al mercado editorial del siglo XX que a la actualidad.
La editorial española Anagrama reveló cuál va a ser la trama de Serotonina, la novela que va a llegar a las librerías argentinas el 9 de enero. "Florent-Claude Labrouste tiene cuarenta y seis años, detesta su nombre y se medica con Captorix, un antidepresivo que libera serotonina y que tiene tres efectos adversos: náuseas, desaparición de la libido e impotencia", comienza el resumen, adelantando el clima nihilista que teñirá al libro.
Según el sello editorial español, el autor plantea en Serotonina al amor como una entelequia y al sexo como una catástrofe. La cultura, ante ese contexto, no puede ser una tabla de salvación.
Otro rasgo que se puede avizorar es la diversidad de paisajes que van a servir como escenario. "Su periplo arranca en Almería –con un encuentro en una gasolinera con dos chicas que hubiera acabado de otra manera si protagonizasen una película romántica, o una pornográfica–, sigue por las calles de París y después por Normandía, donde los agricultores están en pie de guerra. Francia se hunde, la Unión Europea se hunde, la vida sin rumbo de Florent-Claude se hunde", se puede leer.
Cabe señalar que Anagrama goza con la fama de ser la editorial que mejores contratapas realiza, en donde se es fiel al libro y se brinda información vital para el lector. En ese sentido, muchos lectores suelen acercarse a esos textos con temor de sufrir "spoilers". En el caso del libro de Houellebecq, se puede ver cómo el autor sigue confirmando su lugar de privilegio a la hora de narrar la decadencia humana en el siglo XXI.
A continuación, un fragmento más de la contratapa de Serotonina:
Florent-Claude descubre unos escabrosos vídeos pornográficos en los que aparece su novia japonesa, deja el trabajo y se va a vivir a un hotel. Deambula por la ciudad, visita bares, restaurantes y supermercados. Filosofa y despotrica. También repasa sus relaciones amorosas, marcadas siempre por el desastre, en ocasiones cómico y en otras patético (con una danesa que trabajaba en Londres en un bufete de abogados, con una aspirante a actriz que no llegó a triunfar y acabó leyendo textos de Blanchot por la radio...). Se reencuentra con un viejo amigo aristócrata, cuya vida parecía perfecta pero ya no lo es porque su mujer le ha abandonado por un pianista inglés y se ha llevado a sus dos hijas. Y ese amigo le enseña a manejar un fusil...
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