El día después de que se conociera la fórmula bonaerense, Alberto Fernández recibió a Axel Kicillof en su oficina. Los candidatos hablaron de economía, como vienen haciendo desde hace más de un año, según confirmaron desde el entorno del economista.
Atrás quedaron los viejos rencores y las intolerancias de Alberto hacia el ministro de Economía K, al que en 2016 pedía "callar" a través de su cuenta de Twitter.
Kicillof fue blanco de los usuales ataques de Fernández en la red social, donde hasta hace pocas semanas no dudaba en tratar de "pelotudo", entre otros insultos, a cualquier usuario que lo increpara o criticara su postura.
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Pero el candidato a gobernador dice restarle importancia a las peleas del pasado: "Mirá si van a perder tiempo en pedirse disculpas", dicen en su equipo. Tienen mucho de que hablar.
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