"Orgullo hasta el infinito y más allá”, le escribió Soledad Quereilhac (43) a su esposo el 19 de julio pasado. Junto al mensaje, compartió una foto de Axel Kicillof con Cristina Fernández. “Me encanta esta foto”, había dicho dos días antes, cuando se conoció la nueva imagen de “Axel Gobernador”, donde el economista luce más joven. Quereilhac sube al muro las fotos de Kicillof como si fuera una “kicilover” más, como se denominan las fans del candidato. En una de las últimas publicaciones, mostró las nuevas pantuflas con la cara de su marido y la leyenda “Kici & Love”, a lo que varios de sus amigos le respondieron: “Hace rato que lo tenés a tus pies”.
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Soledad y Axel se conocieron “por amigos en común”, cuentan en su entorno. Ambos estudiaron en el UBA, pero carreras muy diferentes: ella Letras y él, Economía. Y siguieron el camino de la academia: se doctoraron, fueron docentes, investigadores y escribieron libros. En 2016, sus ejemplares compartieron estantería en las librerías y Soledad también mostró esa alegría en las redes.
“Hoy todo esto está siendo destruido por este Gobierno saqueador que no cree en el derecho a la educación ni en la necesidad del desarrollo nacional de las ciencias y las humanidades. Porque son neoliberales, pero además porque son brutos en serio, porque son racistas, porque son antipopulares”, escribió Quereilhac en 2018, en un descargo furioso por los recortes en el Conicet, del que forma parte.
Pero más allá de Facebook, la experta en literatura y ocultismo prefiere el perfil bajo. La única vez que habló fue en 2013, cuando junto a los dos hijos de la pareja (León de 10 y Andrés de 7) fueron increpados en el Buquebús, camino a la ciudad uruguaya de Colonia, donde Kicillof es propietario de dos terrenos y una casa. “Quisieron hacer una operación sobre nuestra casa, dijeron que era una mansión de dos pisos y es de medio pelo, muy modesta y sencilla”, dijo entonces a Perfil. Y sobre el ataque agregó: “Nos gritaban 'que se bajen'. Hay un cierto inconsciente bastante facho por pedirle a una familia que se tire al río”. NOTICIAS intentó hablar con Quereilhac, que no forma parte activa de la campaña de su esposo, pero no tuvo respuesta. Como explicó hace seis años, prefiere "la vida normal y el perfil bajo". "Hacemos vida familiar y salimos poco", contó la profesora de Literatura y amante del tango.
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