Sunday 22 de September, 2024

EMPRESAS | Ayer 10:09

El picor de emprender: cuando una idea no te deja en paz

Las claves para poder conducir el ansia emprendedora a un proyecto sustentable.

¿Qué es emprender? Cuando arranca ese sentimiento que, a veces, parece más bien que nos ha picado un insecto con toda su fuerza. Porque una vez que lo sentimos, no podemos dejar de pensar en esa picazón, en esa molestia, que a la vez nos tiene casi sin dormir. Puede durar varios días y hasta tiene un gustito particular. Nos genera cierto placer rascarnos una y otra vez, acaparando toda nuestra atención.
Y, después, claro, todos te dicen: "no te toques, no te rasques". Pero no lo podés evitar. De la misma manera podemos sentir ese primer momento en el que pensamos en emprender. Se instala con una fuerza tal que todo el foco se dirige a esa idea que parece loca, pero que poco a poco empieza a cobrar sentido.

La chispa emprendedora. Vengo de dar una charla Magistral en Chile, en el “Summit Mujer Emprendedora” organizada por Corfo e IncubatecUfro y una de las preguntas recurrentes era: "Sol, ¿cómo hiciste? ¿Qué recomendación nos darías? ¿Cómo empezaste?". Y aquí está la clave: empezar.

Para muchos, el momento de decidir emprender se asemeja a esa picazón persistente. Es un llamado que se siente fuerte, como una necesidad incontrolable de rascar una idea hasta que, finalmente, algo sucede. El Global Entrepreneurship Monitor indica que, en 2022, el 43% de los adultos en América Latina estaba involucrado en alguna fase del proceso emprendedor, lo que refleja un auge en la región. No es solo un impulso personal, es un movimiento colectivo.

Cuando recibí esa primera "picazón" por emprender, fue al identificar la falta de una estrategia coherente en la manera en que muchas empresas manejaban su comunicación y marca personal. Ahí nació mi agencia de PR. Empecé con una idea y una necesidad clara: hacer que la comunicación fuera más estratégica, conectada y humana. Así es como las grandes ideas surgen: cuando ves un vacío, un problema sin resolver, o simplemente cuando la idea no te deja en paz hasta que te pones en acción.

¿Cómo hice para empezar a emprender? Tres recomendaciones. Primero, hay que entender que emprender no es lineal. No seguís un camino fijo; hay curvas, desvíos y obstáculos que pueden aparecer. ¿Lo que me ayudó? Desarrollar una mentalidad resiliente. Fallé muchas veces. Pero cada uno de esos fracasos fue una lección invaluable. Se estima que la mitad de los emprendimientos en Argentina no sobreviven más de dos años y saber esto me preparó para enfrentar desafíos con mayor tranquilidad. Incertidumbre y miedo sí, pero no baje los brazos.
Segundo, rodearte de personas que te impulsen. La primera vez que trabajé con Cirque du Soleil, contaba con un equipo variado. La clave es encontrar personas con habilidades complementarias. Según un estudio de Harvard Business Review, los equipos diversos tienen un 35% más de probabilidades de generar retornos financieros superiores a la media de su industria.
Tercero, diseñá una estrategia clara de marca personal. Como emprendedores, su marca es su activo más poderoso. En la charla dada en Chile muchas mujeres me preguntaban: "¿Cómo puedo ser visible sin perder mi esencia?". La respuesta está en construir una narrativa real que resuene con tu audiencia. La visibilidad es clave: según el Women Entrepreneur Report de Mastercard, las emprendedoras que tienen una marca personal fuerte logran un 30% más de financiación en sus primeras rondas.
¿Y cuándo empezás? No hay un momento perfecto. Ese "bicho" que te pica es la señal. La diferencia entre las personas que siguen rascándose y las que actúan está en la capacidad de mover esa energía hacia el primer paso concreto. Así que, si tenés una idea que no te deja en paz, si sentís esa picazón constante, es hora de hacer algo al respecto.

*Soledad Depresbítero es Lic. Relaciones Públicas y especialista en Marca Personal

 

 

 

por Soledad Depresbítero

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