Cocina ****
Servicio ***
Ambientación ****
La escena gastronómica de Little Horse, centro geográfico de la Ciudad de Buenos Aires, está avanzando a paso firme. De ahí el nombre de una de las recientes aperturas del barrio, Centro, un bistró ubicado en la base de un elegante edificio art decó de los años 40. Abre todo el día, así que las experiencias posibles son varias.
Un buen café con pastelería casera -la carrot cake es uno de los hits-, un sándwich bien cargado para el almuerzo, una cena de platitos con mucha presencia de vegetales de estación, o un super brunch de fin de semana en su amplia vereda.
La cocina está a cargo de Fernando Golabek, un chef de bajo perfil pero con una gran trayectoria que incluye restaurantes con estrellas Michelin en España. De allí provienen platos de la carta como el arroz socarrat, con morcilla y alioli y la crema catalana, a las que se suman vegetales y frutas de estación, aportando frescura.
La carta de la noche consiste en platitos (porciones pequeñas) y platos (porciones más grandes), un sistema muy instalado en los restaurantes de hoy, de los que se sugiere ordenar 5 o 6 para dos personas. Una buena manera de comenzar es con el pâté de hígado y el tartar de res, dos clásicos muy bien hechos. Entre los platos calientes, se destacan los agnolotti de zanahoria asada con queso azul, sutiles y sabrosos.
Para aprovechar lo estacional de la propuesta, lo mejor es sumar platos con vegetales. Golabek trabaja bien las texturas y las capas de sabor, sumando influencias de la cocina asiática y de Medio Oriente en platos comos los puerros tatemados (tostados en las brasas), con cajú y salsa tahina, y el Shari, un delicioso plato vegano con hongos bok choi y kimchi.
“Cuando pienso la carta de un restaurante, siempre empiezo por los postres” -dice Golabek así que asegúrese de guardarse un lugarcito. Además de la crema catalana, tiene opciones deliciosas y originales como el cremoso de chocolate con toffee de miso y salsa inglesa.
El interior es pequeño, un poco apretado cuando se llena, pero la vereda es perfecta para disfrutar la primavera que se viene.
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