De expresión seria y tono cordial, José Eduardo Agualusa parece pensar cada palabra antes de responder. Nacido en Angola hace 59 años, sus libros son leídos con un gran interés en distintas partes del planeta. En sus relatos, publicados en Argentina con el sello Edhasa y traducidos a más de 25 idiomas, se mezclan los viajes interiores de los distintos personajes con la historia reciente de su país.
La nación africana vivió 40 años de conflicto armado desde que se independizó de Portugal. Al poco tiempo, comenzó la Guerra Civil que llevó décadas de violencia y conflicto. Christinne Messiant, socióloga francesa especialista en estudiar la historia de Angola, afirma que en dicho país “hasta el pasado es imprevisible”. Con ese contexto de fondo, los libros de Agualusa proponen un doble camino para los lectores: recorrer el pasado reciente de una sociedad turbulenta y, al mismo tiempo, perderse en un mundo donde lo fantástico y lo real se entreveran de manera constante.
Sin ir más lejos, no son pocos los que comparan la obra del autor africano con la del colombiano Gabriel García Márquez, uno de los grandes referentes del realismo mágico. "Cuando leo a García Márquez es como si estuviera leyendo a un autor africano", supo decir Agualusa en diálogo con NOTICIAS hace 3 años, en su visita al Festival Internacional de Literatura de Buenos Aires (FILBA).
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Tres años más tarde, y con un reconocimiento en ascenso, Agualusa vuelve a dialogar con esta revista y subraya que "en el caso de los angoleños, todos o casi todos tenemos presente a lo fantástico porque es parte de nuestra realidad diaria". Además, señala que de la Ciudad de Buenos Aires lo impresionó "la cantidad de librerías y la variedad de su oferta, que es algo poco común".
Noticias: ¿Qué recuerdos le queda de Argentina de su última visita y cómo la ve en la actualidad?
José Eduardo Agualusa: De la última vez que vi a Buenos Aires, que fue mi primera visita, quedé muy impresionado con los lectores, con la calidad de sus preguntas, con los distintos espacios y ambientes de lectores. También me impresionó la cantidad de librerías y la variedad de su oferta, que es algo poco común. Lamentablemente, cada vez que vengo paso mucho tiempo en actividades y no tengo tanto tiempo para recorrer como quisiera.
Noticias: Mientras que en Argentina la literatura africana está empezando a hacerse conocida, usted remarcó que la literatura latinoamericana fue muy importante países en África.
Agualusa: Sí, tiene una gran influencia en el continente en su conjunto, pero más en particular en Angola y Mozambique, que cuentan con el legado de la cultura portuguesa. Pienso en escritores brasileros como Jorge Amado, João Guimarães Rosa, fueron tan influyentes que hay muchos escritores africanos que hoy existen gracias a leerlos. José Luandino Vieira, por ejemplo, es un escritor angoleño que mientras estaba preso en Cabo Verde, pensó que se podía crear otro modelo de literatura. Y en los años 50, 60 y 70, también los escritores de lengua española fueron muy influyentes en los escritores angoleños. Muchos tenían una colección solo de escritores en lengua española.
Noticias: ¿Por qué cree que ahora la literatura africana está empezando a hacerse más conocida en el mundo?
Agualusa: Nuestros países, por un lado, pasaron por una gran turbulencia política. Eso genera historias. Por otro lado, tienen una gran diversidad cultural. Nuestra diversidad enriquece a la literatura. Y por último, hay una nueva ola de escritores jóvenes, que tienen mucho conocimiento del mundo y tienen un pie en la tradición, en el continente y también son muy sofisticados.
Noticias: Un personaje de La sociedad de los soñadores involuntarios dice: “la guerra no terminó, solo está durmiendo”. ¿Cree que ese es el momento actual de su región? ¿Se puede escribir por fuera de ese conflicto?
Agualusa: Bueno, yo hablo específicamente de Angola, hay países del continente con situaciones políticas diferentes, que nunca tuvieron guerra. En Angola, la guerra terminó pero nunca hubo una discusión profunda sobre lo que pasó. Hay un rencor histórico: la guerra no continúa pero persiste ese rencor, sigue ahí. La pacificación completa de la sociedad todavía no ocurrió.
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Noticias: Se puede relacionar su escritura con la de García Márquez, tanto por el realismo mágico como en los conflictos locales que atraviesan su escritura. ¿Cómo es esa relación, tanto entre ambos continentes, como entre su estilo de escritura y el latinoamericano?Agualusa: Todos los escritores angoleños comparten ese interés por lo maravilloso en lo cotidiano. Esa frontera entre lo fantástico y la realidad no existe, es una excusa. Es una frontera muy difícil de sostener.
Noticias: Julio Cortázar solía decir que esa frontera en realidad no existía, ni en términos literarios ni en la realidad. Que la fantasía y la realidad están más relacionadas que lo que solemos creer.
Agualusa: El realismo mágico está mucho más cercano de lo que pensamos, hay millones de personas que creen que alguien transformó el agua en vino, que caminó sobre el agua, revivió a los muertos. Muchas religiones están en ese registro.
Noticias: Retomando a García Márquez, tanto usted como el autor colombiano tienen la particularidad de incluir el realismo mágico en contexto de disputas políticas, de conflictos armados.
Agualusa: En el caso de los angoleños, todos o casi todos tenemos presente a lo fantástico porque es parte de nuestra realidad diaria.
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Noticias: En Argentina, la historia de Angola no es muy conocida. Existe una frase de Christinne Messiant, socióloga francesa especialista en la historia del país, que sostiene que en Angola "hasta el pasado es impredecible". ¿Qué podría contarle a los lectores argentinos acerca de su país?
Agualusa: Hay mucho para decir de Angola, pero basta con ver la historia más contemporánea: se independizó de Portugal en 1975 y el partido que tomó el poder era de ideología marxista, apoyado por la Unión Soviética. Después, cuando se cae el sistema socialista, el presidente cambia de ideología pero se mantiene en el poder con el mismo aparato. En pocas palabras, tiró por la borda lo mejor del socialismo y se quedó con lo peor del capitalismo.
Noticias: Además de Angola, usted vivió en Brasil, Portugal y ahora reside en Mozambique. ¿Cómo lleva usted esa vida un tanto nómade?
Agualusa: Fue sucediendo de manera natural, no lo viví con grandes dramas. Me fui de Angola cuando la situación política se tornó muy difícil. La distancia, además, me ayudó a ver Angola con más perspectiva y eso me permite entenderla mejor. Cuando uno está metido en Luanda, que es una ciudad muy intensa, las cosas del día a día no te permiten comprender tantas cosas.
Noticias: Uno de los personajes de El vendedor de pasados habla de la contradicción entre escribir sobre la belleza o denunciar el horror. En sus libros usted parece tomar partido por ambas opciones, ¿es una decisión consciente?
Agualusa: Es importante hablar de las dos cosas. La gran diferencia entre Angola y un país del norte de Europa, como puede ser Suecia, es que en Angola es muy fácil encontrar el horror y uno tiene que escarbar para encontrar la belleza. En Suecia, en cambio, se da la situación inversa: es muy fácil encontrar la belleza y tiene que escarbar para encontrar el horror, pero eso no quiere decir que no exista, simplemente está escondido.
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Noticias: Los personajes de sus libros suelen ser ambiguos, hay historias de cambios, de redención, ¿es algo que a usted le interesa contar?
Agualusa: Sí, sobre todo en el libro Teoría general del olvido. Me interesa de darle a los personajes la posibilidad de una segunda vida, porque me interesa comprender la maldad y la chance de redimirse. La guerra civil suele mostrar al otro como enemigo, lo cual es fundamental para que exista el conflicto. El otro pasa a ser alguien que no tiene la misma nacionalidad, y luego alguien que no es humano. Es interesante ver al otro como humano e incluso puede ser parte de la misma familia. La literatura puede servir para mostrar esas cosas y acercar a la gente, mostrar al otro como alguien mucho más cercano de lo que creemos.
Noticias: ¿La literatura fue una herramienta para poder expresar sus ideas pacifistas?
Agualusa: En realidad fue gracias a la literatura que yo me volví pacifista. Cuando escribía, me daba cuenta de eso, porque escribir es ponerse en la piel del otro.
Noticias: En sus libros hay un fuerte componente poético. ¿La poesía es un elemento importante a la hora de construir una narración?
Agualusa: La poesía une elementos que están distantes. A veces, un personaje puede ser mejor retratado con elementos poéticos que con datos certeros. Esa es la sorpresa: unir aspectos que no parecían cercanos. La poesía provoca sorpresa, provoca un enriquecimiento y un enloquecimiento en la prosa, y eso ayuda mucho a construir una historia de ficción.
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Noticias: En distintas entrevistas, usted mencionó que el cine transformó la forma de escribir en el siglo XX. ¿Podría desarrollar esa idea?
Agualusa: Sí, desde la popularidad alcanzada por el cine, la literatura se caracteriza más por frases cortas y contundentes. Se ha tornado mucho más rápida, ya no hace falta una descripción larga.
Noticias: Eso entra en diálogo con la competencia actual que posee la literatura: estamos rodeados de pantallas, textos, contenidos audiovisuales. Quizás ya no hace falta contar cómo es el mar, sino cómo son los sentimientos de los personajes.
Agualusa: Por ejemplo, en el siglo XIX era muy común encontrar hojas y hojas sobre descripciones. Pero estoy de acuerdo con lo que mencionas: los sentimientos son algo que el cine no puede reflejar de la misma manera y ahí la literatura tiene una ventaja
Noticias: ¿Y qué desafíos piensa que tiene la literatura en este contexto?
Agualusa: Leer un libro sigue siendo un momento de intimidad, de soledad, de tranquilidad. Se puede ir al cine y comer pochoclo, o hablar con otra persona, pero para leer se necesita una concentración, una dedicación exclusiva.
Noticias: Usted suele hacer referencia a la tendencia de la humanidad a repetir errores del pasado por olvido. ¿Cómo ve la actualidad del mundo en donde ganan terreno ciertas posturas extremistas?
Agualusa: No creo en las virtudes del olvido. Pienso que es importante conservar y ejercitar la memoria para evitar los errores del pasado. Cuando Brasil votó a Jair Bolsonaro, pudo haber sido consecuencia de no haber transmitido a los jóvenes el horror que contuvo el pasado.
Noticias: Por último, para alguien que quiere comenzar a escribir, ¿qué consejo le daría?
Agualusa: Es importante encontrar sus propios libros, sus propios autores y también sus propias historias, sus propios intereses y sus propias obsesiones. Un escritor tiene que tener su gran inquietud y escribir tiene que ser una urgencia. Hay que escribir en estado de necesidad, en estado de urgencia, escribir porque no puede evitarlo.
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