“Nunca habíamos tenido un crucero swinger, es algo novedoso”, afirmó Ramiro Barutta, operador turístico al medio latino Telemundo. Con un total de 1.128 pasajeros, en su mayoría estadounidenses, el buque de la compañía noruego-estadounidense Azmara Club Cruises arribó al puerto de Buenos Aires. Se estima que el promedio de edad de las parejas que llegaron a Buenos Aires es de entre 35 y 50 años.
El paquete turístico que ofrece el “Azamara Pursuit”, calificado como “un barco boutique en comparación con otros cruceros”, está dedicado a la temática swinger, parejas liberales que buscan hacer intercambio con otras. La particularidad del código swinger en la embarcación se registraría en que sus pasajeros optan por el intercambio de parejas para el sexo, en el interior de sus camarotes de puertas abiertas.
La particularidad de los códigos sexuales swingers se viralizó recientemente por la influencer Dominique en su red social. La tiktoker navegaba por el mar Caribe y observo un llamativo dibujo de un ananá invertido en las puertas de los camarotes. En su posteo “Cuando estás en un crucero y ves que todos tienen imágenes de ananás pegadas en las puertas de sus camarotes”, varios comentarios detallaban que el dibujo de la fruta se usa como señal para indicar que alguien es swinger y busca conectar con gente que practique la misma actividad.
“Se utiliza habitualmente como código para el intercambio de parejas. En la mayoría de los casos, se coloca una piña ilustrada invertida en la puerta del camarote de un huésped interesado en el intercambio de parejas”, explicó el sitio especializado en cruceros, Cruise Hive. El video posteado, en la cuenta @blogionistatravels, alcanzó en poco tiempo más de 11 millones de reproducciones, aunque Dominique confeso que en ningún momento estaba implícito que el barco fuera exclusivamente “de temática sexual".
“Si alguna vez pensaste que no hay muchos swingers, echa un vistazo a todos estos cruceros swingers y mira cuántos ya están agotados”, informa el portal especializado SwingerHelp y agregó: “Hay tantos swingers en este mundo que podemos llenar y vender cruceros enteros. Es realmente impresionante ver cuántos viajes se agotan cada año, especialmente porque estas no son vacaciones baratas. Estamos hablando de una experiencia vacacional de lujo de principio a fin”.
Las 564 parejas del Azmara Pursuit se embarcaron en Río de Janeiro para pasar fin de año frente a la costa de Brasil. Luego, navegaron hacia el sur hasta llegar a Punta del Este y con destino final en Buenos Aires, para luego retornar al país carioca y emprender el regreso a Estados Unidos. El barco fue contratado, en forma de chárter, por la empresa estadounidense Seek, Discover y Connect (SDC) que se encargó de toda la coordinación logística del viaje.
La empresa SDC lleva a cabo este tipo de cruceros swingers y también otro tipo de viajes para solos y solas. Es la primera vez que eligen como destino Sudamérica para uno de sus eventos turísticos. El viaje es de 8 noches y 9 días completos donde se les asegura proponer de nuevas noches eróticas, fiesta en piscinas, DJ´s internacionales y lo mejor en entretenimiento para adultos.
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