Finalmente, luego 16 meses que el Gobierno nacional terminó de cerrar su acuerdo con los bonistas privados para reestructurar su deuda, la provincia de Buenos Aires con la aprobación del 98% de los representantes de las acreencias. Así lo confirmó el ministro de Hacienda y Finanzas Pablo López, durante la conferenciad de prensa en la que el gobernador Axel Kicillof presentó al acuerdo: “La propuesta de reestructuración de deuda obtuvo adhesión suficiente para canjear el 98% de la deuda en moneda extranjera”. El gobierno provincial tuvo que negociar la reestructuración de casi US$ 7.150 millones. “Hemos conseguido en un año y medio ocho nuevos préstamos y estamos trabajando en cinco créditos más”, agregó para finalizar subrayando el hecho que este acuerdo implica profundizar el vínculo con organismos multilaterales de crédito. Y para concluir, hubo un agradecimiento al ministro de Economía de la Nación, Martín Guzmán.
En el todo este tiempo pasaron sucesivas prórrogas, una tira y afloje marcado a fuego por amenazas de que la oportunidad de acordar era la última, desembocó finalmente en la versión final que el viernes pasado se dio a conocer y hoy se anunció oficialmente. El anuncio lo formuló el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, en una conferencia de prensa en el Salón Dorado de la Casa de Gobierno de La Plata.
Efectivamente, el Gobernador no perdió la oportunidad para marcas las diferencias con la anterior gestión de María Eugenia Vidal: “entre 2016 y 2019 se emitieron US$ 5.800 millones. Evidentemente hubo un festival de deuda en la Provincia que no se podía pagar”, destacó.
El Gobierno ya sacó cuentas y anticipó que, gracias a la aceptación masiva de la propuesta, el alivio financiero será de más de US$ 4.000 millones en total. Los servicios totales reconvenidos durante el período 2020-2024 serán de US$4450 millones, un 75% de la deuda original, los plazos de repago se extenderán, en principio, a tres veces más (algo lógico por la inminencia de los vencimientos) y habrá una reducción en el costo total de la deuda por una poda en el cupón máximo a pagar, del 40% y un cupón promedio de 5,6% de interés. También habrá tres años de gracia para el capital reestructurado. La quita, entonces, debería contabilizarse como del 27% del total adeudado, aplanándose los años con fuertes vencimientos en los que se proyecta que no habrá más de US$ 900 millones de tope, en lugar de los US$ 1.500 millones que subrayaban hubieran implicado las condiciones originales.
En cambio, lo que los analistas observan es que los que decidieron no acordar, tendrán condiciones mucho más desfavorables que esta propuesta. Así, se cerró el capítulo de las renegociaciones de deuda provinciales ya que Buenos Aires era la que quedaba por resolver lo que sus pares y la Nación fueron firmando antes. Y se abren los interrogantes sobre el futuro cercano: ¿comenzará un ciclo de nuevo endeudamiento para financiar obras postergadas?,¿habrá predilección por el mercado local de deuda?, ¿se aplicarán nuevas instrumentos indexatorios para movilizar el ahorro nacional o se debera concurrir, igualmente, al mercado internacional voluntario?.
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