La resiliencia es la capacidad de sobreponerse a las adversidades, aprender, construir sobre ellas y proyectarse a futuro. Es una condición humana que se encuentra potencialmente en cada ser, pero que requiere decisión, compromiso y plena consciencia para desarrollarla. Una persona no nace resiliente, se vuelve resiliente. Es el arte de reinventarse, de hacerse a sí mismo, para luego hacer con los demás.
Es una de las habilidades claves del autoliderazgo, que es el primer paso de todo líder consciente que anhela impactar en otras vidas. Es la actitud del héroe, del protagonista que inspira un cambio, una transformación, un camino a seguir.
La vida en sus distintas áreas (personal, laboral, familiar, social, de salud, económica, etc.) es un continuo vaivén de circunstancias; y el impacto de algunas de ellas puede desestabilizarnos. Ahora bien, ¿Cuánto tiempo decidimos permanecer en ese estado de inacción y dominación por lo externo? ¿Qué hacemos con “eso” que sucede? ¿Cómo lo interpretamos? ¿Cómo gestionamos las emociones que nos genera? ¿Qué significado le damos? ¿Nos derrota… o nos abre las puertas a un aprendizaje y crecimiento más profundo?
La actitud del protagonista implica girar el foco, volver la mirada al interior y asumir el poder personal; es salir del ser sufriente, dependiente y víctima de las circunstancias externas, que se queja, busca excusas y culpa al afuera, para mirarnos a nosotros mismos, conectar con la sabiduría interna, los talentos y abrirnos a nuevas posibilidades.
El foco en las fortalezas, los recursos internos, las capacidades, es la base de un modelo “preventivo” basado en las potencialidades. Si cada uno de nosotros decide desarrollar los propios dones y transformarlos en altas competencias, seguramente, estaremos mejor preparados para afrontar y trascender las adversidades cuando éstas se presenten.
Existen dos modos básicos de afrontamiento, es decir, dos estilos de proceder ante situaciones que generan estrés: la “indefensión aprendida” (siento que no podré) o la “autoeficacia percibida” (siento que podré superarlo y crecer). Cada creencia despertará emociones, actitudes, energías distintas y por ende, obtendrá resultados diferentes. Tú eliges.
Por eso, la clave es asumir la responsabilidad de entrenarse, prepararse, desarrollando una autoestima saludable, la inteligencia emocional, la flexibilidad, creatividad y una actitud positiva, acompañado por un entorno que apoye e impulse el avance. Y siendo líder, es fundamental influir y desarrollar estas competencias en el equipo.
Te acompaño en el proceso resiliente, sea personal o profesional. Tu pasado no te condiciona para crear un nuevo futuro, para escribir una historia con otro final.
Ine Francisconi
Coach en Liderazgo
& Desarrollo del Talento
www.inefrancisconi.com
Instagram/LinkedIn: @inefrancisconi
WhatsApp: +54 9 11 6821 2020
por CEDOC
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